El 29 de octubre, la Comunidad Valenciana sufrió los devastadores efectos de una DANA que arrasó todo lo que pilló a su paso. Las consecuencias de este fenómeno meteorológico fueron más de 200 pérdidas humanas y numerosos destrozos materiales, obligando a cerrar comercios y a parar la vida en 75 municipios valencianos, sin olvidar el resto de comunidades autónomas afectadas, como Castilla-La Mancha y Andalucía.
Esta situación forzó el cierre –entre otros negocios– de dos clínicas veterinarias ubicadas en Sedaví y Catarroja, dos de las localidades más afectadas por la gota fría, dejando así sin equipos ni servicios de atención veterinaria a ambas zonas de Valencia. Fue el caso de la Clínica Veterinaria Sedaví y la Clínica Veterinaria Terra Catarroja.
“Me llamó la empresa en la que tenemos contratada la alarma diciéndome que a través de la cámara se veían cosas flotando por el suelo”
“Me llamó la empresa en la que tenemos contratada la alarma diciéndome que a través de la cámara se veían cosas flotando por el suelo”. Así recuerda Lola Doménech, responsable dentro del Grupo VetPartners de la Clínica Sedaví, los primeros minutos del paso de la DANA por este centro veterinario. “Más tarde me llamó una compañera que la había cogido el torrente de agua y estaba en el capó de su coche”, continúa.
En menos de 24 horas –a la mañana siguiente– esta clínica estaba completamente inaccesible. “Cuando paseabas por las calles era como un escenario de guerra”, asegura Doménech en una entrevista para AnimalCare. En concreto, la clínica de Catarroja estaba prácticamente bloqueada. “Nos ayudaron los bomberos a abrir la puerta porque no se podía. El agua había alcanzado 1,70 metros”, comenta la veterinaria.
Esta situación dejó todo el equipamiento veterinario y quirúrgico inutilizable. "Todo el interior de la clínica, tanto en su estructura como en su equipamiento, estaba para tirarlo a la basura. Todo", recuerda la veterinaria. Esta situación fue similar en ambas clínicas: “En los dos centros tanto el equipamiento como la estructura de la clínica estaban hechos un desastre”, sostiene.
Sin embargo, gracias al apoyo de VetPartners, sus equipos y todos los voluntarios, ambas clínicas han logrado reabrir sus puertas con unas instalaciones completamente renovadas. "Solicitamos muy rápido un acta notarial para documentar lo ocurrido y poder gestionar mejor la reclamación con el seguro", explica Doménech. "A día de hoy el seguro aún no ha pagado, pero VetPartners apostó por nosotros e hizo la inversión necesaria para recuperar las dos clínicas", comenta la responsable de la clínica.
"La ambulancia la pusimos en funcionamiento a los tres días de la riada"
Mientras se llevaba a cabo la reconstrucción, se habilitó una consulta temporal y se puso en marcha una ambulancia veterinaria para garantizar la atención de urgencia. "La ambulancia la pusimos en funcionamiento a los tres días de la riada. Dentro de la clínica aún quedaba barro, por lo que era más seguro e higiénico atender a los animales desde la ambulancia", señala Doménech. Además, la solidaridad del sector veterinario fue fundamental en estos momentos: "El Colegio de Veterinarios de Valencia, los proveedores y los voluntarios estuvieron al pie del cañón proporcionando desde material hasta piensos, ya que las empresas de transporte no podían acceder a la zona".
"Desde el primer día estuvimos en contacto con nuestros clientes, informándoles de que seguíamos ofreciendo servicios mínimos a través de los canales de WhatsApp", indica la veterinaria. "Los equipos de las clínicas han demostrado una implicación increíble, habilitando consultas y asegurándose de que pudiéramos atender a los animales lo antes posible".
Ahora, con la reapertura de la Clínica Veterinaria Sedaví y la inminente inauguración de la de Catarroja en las próximas semanas, el equipo se centra en comunicar a los clientes que los servicios han vuelto a la normalidad. "Eso ha sido labor de nuestros recepcionistas y auxiliares, además de medios de comunicación como vosotros, que nos dan voz y nos ayudan a que la población sepa que estamos otra vez trabajando", comenta la veterinaria.
La nueva Clínica Veterinaria Sedaví cuenta ahora con un diseño moderno y minimalista, además de un equipamiento de última tecnología. "Hoy esta clínica es testigo de una nueva era, pero lo que no ha cambiado es la esencia: su equipo", señala el Grupo VetPartners a través de un comunicado. Gracias a una inversión de más de 200.000 euros, el centro está preparado para ofrecer servicios como medicina preventiva, cirugía, radiología, ecografía, oftalmología y atención a animales exóticos, entre otros. Al mismo tiempo, la Clínica Veterinaria Terra Catarroja, que pronto reabrirá sus puertas, ofrecerá una gama de servicios similar.