El Centro de Estudios Andaluces, dependiente de la Junta de Andalucía, ha publicado este martes los resultados del Estudio de Opinión Pública, también llamado Barómetro andaluz, con datos del mes de diciembre. Esta encuesta, realizada a 2.627 ciudadanos de esta comunidad autónoma, muestra estadísticas relevantes sobre el ámbito sanitario.
Una de las respuestas más destacadas es que un importante porcentaje de andaluces se mostraría a favor de que la sanidad no sea gestionada por las autonomías. En concreto, un 54,3 % estaría “de acuerdo” o “muy de acuerdo” a “devolver la sanidad y la educación al Gobierno central, y reducirse así las competencias de todas las comunidades autónomas”.
A los andaluces les preocupa principalmente el paro (22,1 %), seguido de la corrupción política (8,1 %) y la sanidad (5,2 %)
Por su parte, tan solo un 25,8 % de los ciudadanos encuestados se muestran “en desacuerdo” o “muy en desacuerdo” en que el Ministerio de Sanidad vuelve a asumir las competencias sanitarias al completo. Mientras, un 19,4 % ha expresado una respuesta distante, y no está “ni de acuerdo ni en desacuerdo” o “no sabe” qué opción de gestión es la más idónea.
Estas afirmaciones, sin embargo, entran en contradicción con otras respuestas dadas. Y es que, según el barómetro, hasta un 57,3 % de los andaluces consideran “muy de acuerdo” o “de acuerdo” que “Andalucía debería luchar por tener más competencias y poder autonómico”. A su vez, más de un 80 % apuesta a que su comunidad “sea más reivindicativa con el Gobierno central para conseguir una mejor financiación autonómica”.
LA SANIDAD, TERCER PROBLEMA EN ANDALUCÍA
Al igual que hace el CIS, el Estudio de Opinión Pública ha preguntado a los andaluces cuál consideran “el principal problema que existe actualmente en Andalucía”. En la respuesta acumulada, se comprueba que lo que más les preocupa es el paro (22,1 %), seguido de la corrupción política (8,1 %) y la sanidad (5,2 %). A pesar de ubicarse en una posición alta, la preocupación por la sanidad ha bajado un lugar con respecto al barómetro de julio (9,9 %).
Un 47 % de los encuestados están “muy de acuerdo” o “de acuerdo” en que se gaste más dinero en servicios públicos “aunque eso signifique subir los impuestos”
Por su parte, cuando a los encuestados se les pregunta por el problema que más les afecta personalmente, el ámbito sanitario adquiere un mayor protagonismo. Un 6,3 % de los andaluces que han respondido al barómetro ubican a la sanidad como el principal problema, situado tan sólo por detrás de la falta de trabajo (12,3 %).
No obstante, un 40,1 % considera que la sanidad en Andalucía funciona “muy bien” o “bien”, el mismo porcentaje exacto (40,1 %) que los que opinan que lo hace “mal” o “muy mal”. Un 25,8 % de los andaluces creen que deben reducir las listas de espera y los tiempos de atención; un 13,1 % considera que faltan profesionales médicos; y un 12,7 % ha valorado la calidad de la asistencia.
DEFENSA DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS
A la hora de valorar la implementación de impuestos, los andaluces se muestran a favor de garantizar la calidad de los servicios públicos. Por una parte, un 47 % está “muy de acuerdo” o “de acuerdo” en que se gaste más dinero en servicios públicos “aunque eso signifique subir los impuestos”. Al mismo tiempo, hasta un 56,8 % está “en desacuerdo” o “muy en desacuerdo” en que se bajen los impuestos “aunque eso implique reducir servicios públicos”.
Un 10,8 % de los andaluces le piden a la Junta de Andalucía que su prioridad sea "mejorar los servicios sanitarios"; un 61,3 % le exigen que "se genere más empleo"
En relación a estas respuestas, los ciudadanos de Andalucía tienen claro cuáles deben ser los objetivos de actuación de la Junta para los próximos cuatro años. La mayoría, un 61,3 % considera una prioridad “que se genere más empleo”. A continuación, los andaluces le piden (un 10,8 %) “mejorar los servicios sanitarios” y “que suban los salarios” (8,3 %).
UN 5,27 PARA JESÚS AGUIRRE
Los andaluces han podido puntuar también a los consejeros y al equipo de Gobierno completo que forman PP y Ciudadanos. Jesús Aguirre, responsable de Salud y Familias, ha obtenido un 5,27, una de las puntuaciones más bajas, solamente superado por el vicepresidente Juan Marín (4,76). A pesar de ello, y de ser desconocido para un 80,5 % de los encuestados, el consejero sanitario ha aumentado su nota de julio, que fue de un 4,70.