El SMA exige la retirada de un marcapáginas del SAS que vincula las agresiones a fallos en la comunicación

El Sindicato Médico Andaluz acusa al Servicio Andaluz de Salud de trasladar a los profesionales la responsabilidad de las agresiones sufridas en su entorno laboral

  • El marcapaginas de la polémica del SAS -

El Sindicato Médico Andaluz (SMA) ha solicitado la retirada inmediata de un marcapáginas divulgativo editado por el Servicio Andaluz de Salud (SAS) por considerar que "justifica implícitamente las agresiones a los profesionales atribuyéndolas a problemas de comunicación". En un comunicado, el sindicato ha expresado su “indignación” por el contenido de este material, en el que se ofrecen recomendaciones sobre “buenas prácticas en comunicación” en el marco de la campaña “Stop a las agresiones”.

Según denuncia el SMA, el mensaje del marcapáginas constituye “un acto inicuo e intolerable” que “en sí mismo, representa una agresión más”. “Nada justifica una agresión. Los insultos, amenazas y golpes son siempre inaceptables, incluso en el supuesto de que el agredido no haya mostrado especial habilidad en la forma de comunicarse con un paciente”, señala el sindicato. “Sugerir lo contrario es una ruindad”.

El sindicato considera especialmente grave que desde el SAS se apunte que la responsabilidad de determinadas agresiones puede recaer en la comunicación del profesional. “Dar a entender que una médica embarazada a la que han tirado al suelo de un empujón, una profesional a la que han escupido y amenazado de muerte, o un médico al que le han puesto una navaja en el cuello tienen la responsabilidad de lo que les ha pasado por ser poco empáticos constituye un acto miserable desde el punto de vista moral”, afirma el SMA.

“Los insultos, amenazas y golpes son siempre inaceptables, incluso si el agredido no haya mostrado especial habilidad en la forma de comunicarse con un paciente” 

Además, el comunicado subraya que los propios datos del SAS contradicen el enfoque del material informativo, ya que solo un pequeño porcentaje de las agresiones están relacionadas con el trato recibido. “La mayoría de las agresiones se deben a causas relacionadas con las demandas del usuario, al desacuerdo con las normas de funcionamiento del centro o a la disconformidad con el tiempo de atención”, advierte la organización sindical.

En cuanto al contenido del marcapáginas, el SMA critica afirmaciones como la que recomienda no culpar al exceso de trabajo o a la organización porque “reconfortará nuestra vanidad, pero no mejorará la situación”. También reprueba la indicación de evitar sugerir a los pacientes que interpongan una reclamación. “La reclamación no es la solución”, se lee en el marcapáginas, en mayúsculas. Según el sindicato, esto muestra que “el SAS no quiere que le pongan reclamaciones, aunque sea a costa de que peguen a sus médicos”.

El texto divulgativo también incluye consejos sobre cómo mirar a los ojos al paciente, escucharlo con atención, sonreír, empatizar con sus sentimientos, y explicarle todo con calma, preguntando al final si le ha quedado alguna duda. El SMA considera que estas recomendaciones reflejan el ideal asistencial de los profesionales, pero recuerda que en muchas ocasiones resulta inalcanzable “por falta de tiempo y de medios” y por “un modelo de gestión centrado en la cantidad antes que en la calidad de la asistencia”.

Por último, el sindicato concluye que los profesionales sanitarios intentan paliar las consecuencias de “un sistema sanitario lastrado por la infrafinanciación y con graves carencias estructurales”, incluso a costa de su salud física y mental. “Es desalentador que en estas circunstancias no solo debamos soportar las agresiones de algunos pacientes, sino también la de una organización que las justifica”, concluye el comunicado.
 

*Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.