El servicio de Oftalmología del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza acaba de poner en marcha, en colaboración con varios profesionales de Atención Primaria y por primera vez en Aragón, un novedoso proyecto piloto de investigación en el cribado del edema macular (encharcamiento de la porción central de la retina) en la población diabética del sector sanitario Zaragoza 3.
Para ello, se ha incorporado al Centro de Salud Delicias Sur una nueva tecnología que integra en un mismo equipo una tomografía de coherencia óptica, OCT, similar a un escáner de retina, en lenguaje coloquial, y las tradicionales retinografías (fotografías del fondo de ojo). La adquisición simultánea de ambas modalidades de imagen, totalmente benigna y sin ningún riesgo para el paciente, persigue mejorar sensiblemente la precisión del actual sistema de diagnóstico precoz de la retinopatía diabética en nuestro país.
El 25% de los pacientes con diabetes muestra algún tipo de retinopatía diabética y el porcentaje aumenta significativamente con la duración de la enfermedad
Aprovechando el circuito habitual de cribado de la retinopatía diabética, una fotógrafa del centro de salud obtiene las imágenes. Estas son interpretadas por un médico “lector” especialmente entrenado, de Atención Primaria, el cual, a través de la historia clínica electrónica, remite las imágenes dudosas o patológicas a los oftalmólogos de la Unidad de Retina del Hospital Lozano Blesa, que decidirán la pauta a seguir.
En opinión de Javier Ascaso, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Clínico Universitario, “la Atención Primaria es el primer escalón en la asistencia sanitaria y pequeñas acciones en la misma tienen una importante repercusión en la población general. Por ello, dotar con recursos tecnológicos a sus profesionales y mejorar la coordinación entre niveles asistenciales es fundamental. Este proyecto de investigación da buena cuenta de ello, pues valorará si la introducción de la tecnología OCT en Atención Primaria para obtener imágenes tridimensionales de la retina permite detectar edemas maculares diabéticos incipientes antes de que se produzca un daño avanzado”.
La retinopatía diabética se ha triplicado en los últimos 15 años, siendo la principal causa de ceguera en la población general de los países desarrollados como el nuestro. Un 25% de los pacientes con diabetes muestra algún tipo de retinopatía diabética y su incidencia aumenta con la duración de la enfermedad, alcanzando hasta el 90% en pacientes con más de 25 años de evolución. La pérdida de visión en los enfermos con diabetes se debe fundamentalmente al edema macular diabético, que no es más que el acúmulo de líquido en la parte central de la retina, aquella que es más importante para la visión central.
De acuerdo con el doctor Javier Lara, oftalmólogo de la Unidad de Retina del Clínico y coordinador del proyecto, “los actuales programas de 'screening' de retinopatía diabética, basados exclusivamente en el empleo de fotografías de fondo de ojo para clasificar el grado de afectación, permiten únicamente identificar casos de edema macular diabético ya establecidos, en los que suele existir un daño retiniano estructural a veces irreversible. Sin embargo, los casos incipientes no son detectados, y este retraso diagnóstico hace que respondan peor a los tratamientos que disponemos, precisando un mayor número de inyecciones intraoculares”.