La Comunidad de Madrid (CAM) es una de las que registran menor tasa de prevalencia (total de población afacetada), con 1.188 pmp, frente a los 1.304 pmp de la media nacional. Asimismo, se sitúa por debajo de la media en la incidencia (nuevos casos de pacientes) de 137 pmp, frente a los 147 pmp de la media española, aunque con un crecimiento de casi un 5% con respecto al año anterior.
A pesar de ello, el número de personas que han pasado a necesitar Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS), lo que es lo mismo, diálisis o trasplante, creció en el último año en la en más de 900 pacientes. Así, se estima que ya son casi 600.000 madrileños los que padecen enfermedad renal crónica, de los cuales casi 8.000 son pacientes que precisan este tipo de tratamientos.
Se estima que, en 20 años, un tercio de la población tendrá 65 años o más (principal segmento de población con ERC), y con la actual tendencia, en estas dos décadas se habrá duplicado el número de personas de esta edad en TRS.
FACTORES DESFAVORABLES
El aumento de la incidencia de esta patología se relaciona con cuestiones como el aumento de la esperanza de ida y el envejecimiento de la población, pero principalmente con otros factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular, la hipertensión arterial, el tabaquismo o cuestiones relacionadas con los estilos de vida poco saludables, como la obesidad, el sedentarismo, o la mala alimentación con productos procesados.
En cuanto a la mortalidad, la enfermedad renal crónica ha aumentado su peso como causa de muerte en España más de un 30% en la última década, y en 2016 fallecieron en 4.700 personas en TSR en nuestro país, es decir, casi 13 personas al día.
De ahí que la Sociedad Española de Nefrología, junto a la Federación Nacional de Asociaciones para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (ALCER), y otras sociedades científicas y médicas como la Organización Nacional de Trasplante (ONT), la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica (SEDEN), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) y la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), han querido aprovechar la celebración del Día Mundial del Riñón para hacer un llamamiento a la sociedad sobre la importancia de la promoción de la salud renal
La prevención se considera fundamental para frenar el avance de una patología que ya se conoce como “la epidemia silenciosa” -al tener un infradiagnóstico del 40%, y un 25% de afectados que desconoce su situación en las fases iniciales de la ERC-, y cuyos principales factores de riesgo son modificables en su mayor parte con la adopción de hábitos de vida saludables.
CONSEJOS PARA UNA BUENA SALUD RENAL
Estas entidades científicas han elaborado una serie de materiales divulgativos, disponibles en la web www.senefro.org, con información general sobre la salud renal y ocho reglas de oro para cuidarla.
Las recomendaciones pasan por; mantenerse en forma y en activo; seguir una dieta saludable; comprobar y controlar el nivel de glucosa en sangre; comprobar y controlar la presión arterial; mantener una ingesta de líquidos adecuada; no fumar; no automedicarse ni tomar anti inflamatorios ni analgésicos regularmente si no es por indicación médica: así como chequear la función renal si se tiene uno o más factores de “alto riesgo”, por ejemplo, diabetes, hipertensión u obesidad.