La Generalitat Valenciana desdice su mensaje y recurre ahora al potencial de la privada

El consejero de Sanidad Universal de la Generalitat Valenciana, Miguel Mínguez, ha avanzado que se han iniciado los trámites para que los pacientes que tengan que ser operados de las patologías más prevalentes puedan operarse en la sanidad privada.

De izq. a dcha., el consejero Miguel Mínguez, junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig. (Foto: GVA)
De izq. a dcha., el consejero Miguel Mínguez, junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig. (Foto: GVA)

El consejero de Sanidad Universal de la Generalitat ValencianaMiguel Mínguez, ha señalado recientemente que la reducción de las listas de espera es una prioridad para el próximo año. En este sentido, ha avanzado que se han iniciado los trámites para que los pacientes que tengan que ser operados de las patologías más prevalentes puedan operarse "desde el primer día" en la sanidad privada si, previsiblemente, tengan que esperar más de 60 días en la pública.

Se cumple de esta forma el anuncio del presidente Ximo Puig en el marco del Debate de Política General celebrado a finales de septiembre, donde la gestión de la sanidad tuvo un papel protagonista.  Uno de los planes del Ejecutivo para reducir las listas de espera resultó soprendente: el Govern puso sobre la mesa la opción de derivar a la sanidad privada si el paciente tiene que esperar más de 60 días para ser intervenido quirúrgicamente en el sistema público.

Los sucesivos gobiernos liderados por Ximo Puig han liderado la reversión de hospitales públicos gestionados por el sector privado, como los de Alzira en 2018 (liderado por la consejera Carmen Montón) y Torrevieja en 2021 (capitaneado por Ana Barceló)

Minguez ha precisado ahora que, para reducir las listas de espera, se prevé la modificación del decreto de 1996 de medidas excepcionales para derivar pacientes a la privada si la demora supera los dos meses. La partida de reintegro de los gastos derivados de asistencia pasa así de 15 a 22 millones de euros.

Es preciso recordar que los sucesivos gobiernos liderados por Ximo Puig han liderado la reversión de hospitales públicos gestionados por el sector privado, como los de Alzira en 2018 (liderado por la consejera Carmen Montón) y Torrevieja en 2021 (capitaneado por Ana Barceló). No obstante, los propios datos de la Consejería de Sanidad Universal y Salud Pública muestran la falta de acierto de la Administración al adoptar esta decisión.

No en vano, las cifras reflejan miles de derivaciones de pacientes tanto a hospitales como a clínicas privadas. En los primeros meses de 2022, la cifra de pacientes derivados a la sanidad privada en la Comunidad Valenciana ha superado los 9.200.

En los primeros meses de 2022, la cifra de pacientes derivados a la sanidad privada en la Comunidad Valenciana ha superado los 9.200

Un dato que, en términos económicos, se traduce en un total de 7.021.212 euros entre enero y abril del presente año y que, asimismo, supera los 21 millones de euros en el cómputo total del año.

En paralelo, la Administración valenciana apuesta por unidades de control de demora, equipos robóticos para cirugías, refuerzo por las tardes, mejora por especialidades e insisten en la necesidad de establecer una colaboración con el sector privado

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