Valencia lleva a los tribunales un curso de pseudoterapias contra el cáncer

Está previsto que se celebre el próximo sábado y en el mismo se repartirá un producto que ya fue catalogado como ilegal para su comercialización como fármaco por la propia Agencia Española del Medicamento.

El Colegio Oficial de Médicos de Alicante ha dado la voz de alarma sobre el curso de pseudoterapias contra el cáncer
El Colegio Oficial de Médicos de Alicante ha dado la voz de alarma sobre el curso de pseudoterapias contra el cáncer

La Dirección General de Alta Inspección Sanitaria de la Consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha presentado una denuncia en los tribunales para que se impida la celebración de un curso en Alicante el próximo sábado donde se promocionará una pseudoterapiacontra el cáncer. Se trata del producto conocido como MMS (solución mineral milagrosa), que desde hace años se comercializa en el mercado ilegal. La Consejería ha tenido conocimiento de este curso gracias a la denuncia del mismo por parte del Colegio de Médicos de Alicante.

La propia Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) dio la voz de alarma en 2010. A través de un comunicado ordenó que se procediera a la retirada del mercado de todos los ejemplares del citado producto. “Este producto se presenta dotado de propiedades terapéuticas y preventivas de enfermedades de todo tipo: infecciosas, tumorales, degenerativas…”, por lo que le correspondería la consideración legal de medicamento.

El citado producto no ha sido objeto de evaluación y autorización previa para su comercialización por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios

Sin embargo, la Aemps dejaba claro que el citado producto no ha sido objeto de evaluación y autorización previa para su comercialización por su parte, siendo su presencia en el mercado ilegal. Los efectos adversos del MMS pueden ser graves. El clorito de sodio, en solución acuosa y cuando se administra en las condiciones indicadas, se transforma en ácido cloroso que se degrada a dióxido de cloro.

Todas estas sustancias tienen una acción oxidante fuerte, y su consumo directo en esas condiciones puede producir dolor abdominal, nauseas, vómitos, diarrea, intoxicaciones, fallo renal y metahemoglobinemia. Las autoridades sanitarias canadienses constataron en su día la aparición de dos casos de efectos adversos graves, que en uno de ellos pusieron en peligro la vida del paciente.

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