Con las elecciones ya pasadas y los gobiernos conformados, las consejerías sanitarias de las distintas comunidades autónomas marcan sus prioridades en las primeras semanas de mandato. Varias de ellas han establecido que es una urgencia emprender medidas para reducir las listas de espera.
La última región en abordar esta materia ha sido Navarra. La región que dirige la María Chivite ha anunciado que va a elaborar un plan especial para reducirlas a medio plazo. Desde el Departamento de Salud consideran que la evaluación negativa de esta clasificación “requiere un diagnóstico a fondo y un abordaje estructural de sus causas de manera compartida entre gestores, sanitarios, profesionales y la ciudadanía”.
Los gobiernos autonómicos de Navarra, Comunidad Valenciana o Madrid han anunciado que pondrán en marca planes de choque para reducir las listas de espera
También ha adelantado un plan de choque contra las listas de espera la consejera de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Ana Barceló. Según ha precisado, este método irá destinado a las intervenciones quirúrgicas, así como a las primeras consultas, a las pruebas diagnósticas y las urgencias. Asimismo, ha anunciado que mantendrá la colaboración público-privada como ayuda y de forma “razonable, proporcionada, alejada de prejuicios y siempre pensando en el beneficio de la ciudadanía”.
Por otra parte, entre los planes anunciados por Isabel Díaz Ayuso y Enrique Ruiz Escudero para la Comunidad de Madrid ocupa un destacado lugar su propuesta para reducir las listas de espera de esta región “a la mitad”. Para ello, se han planteado impulsar un plan de choque con acciones como una auditoría, la optimización de los recursos, la publicación de los datos, la profesionalización en la gestión del sistema sanitario y la ampliación del horario de funcionamiento programado de los hospitales.
BUENOS DATOS EN EXTREMADURA
Mientras, en otras regiones están de enhorabuena al visualizar un descenso en el número de pacientes que aguardan para una cita o una intervención. Es el caso de Extremadura, cuyo consejero José María Vergeles ha asegurado que desde el 2015 se han reducido un 40,7% y que la media regional es de 111 días. A pesar de ello, ha apuntado que “tenemos que seguir permanentemente pendientes de ellas y trabajando incansablemente, aunque hayan mejorado”.
Regiones como Castilla-La Mancha, Extremadura o Andalucía han informado que en los últimos meses se está reduciendo el número de pacientes que esperan para una intervención
Otra región que ha actualizado sus datos ha sido Castilla-La Mancha. Según la Consejería de Sanidad, estas se han rebajado en casi un 25% entre 2015 y 2019. Actualmente, al finalizar el mes de agosto, había 98.093 personas pendientes de ser llamados, un total de “32.462 menos” que hace cuatro años.
Por su parte, la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ya lleva meses con un plan en vigor para reducir las esperas. Desde que se confirmó el cambio de gobierno, ha sido una de las tareas que más ha tenido ocupado al consejero Jesús Aguirre. Así, a 30 de junio, disminuyeron un 3,9% (6.178 pacientes menos) desde el mes de diciembre.