Merck ha ganado la partida en Estados Unidos. Y es que, la compañía ha obtenido un contrato nacional para suministrar su biosimilar Remicade de Johnson & Johnson. Así, la compañía se ha impuesto al biosimilar Inflectra de Pfizer gracias a una oferta en el precio que superó a la de sus rivales.
Merck comercializa el biosimilar en sociedad con Samsung Bioepis de Corea del Sur, quien fabrica el producto. Hasta ahora, según ha detallado Fierce Pharma, Merck no ha publicado el precio del contrato, pero cuando lanzó el medicamento el pasado año, la compañía aseguró que proporcionaría un descuento del 35% en el precio de lista al medicamento original.
Merck comercializa el biosimilar en sociedad con Samsung Bioepis de Corea del Sur, quien fabrica el producto
El desarrollo marca un revés para Pfizer, que ha visto gran parte del éxito limitado de su biosimilar Inflectra proveniente de sistemas como el VA. Los ejecutivos de la compañía han explicado que "sistemas altamente integrados" como el VA han adoptado su Inflectra más rápido que el mercado comercial debido a la dinámica de los precios de los medicamentos. A finales del año pasado, Inflectra tenía una participación del 5,6% del mercado global de infliximab.
Pfizer ha estado a la vanguardia de un esfuerzo para resaltar las estrategias que usan los fabricantes de medicamentos de marca para proteger sus productos de la competencia. La compañía argumentó que los fabricantes de medicamentos de marca están difundiendo información "falsa y engañosa" para crear confusión y dudas sobre los delitos biológicos en Estados Unidos.