El pasado 2 de febrero 15.475 aspirantes se presentaron al examen para Médico Interno Residente para alzarse con una de las 6.797 plazas ofertadas por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Esto significa que 8.678 jóvenes médicos no obtuvieron la recompensa por la que llevaban un año luchando.
No conseguir plaza parece el fin del mundo, sin embargo, la realidad es otra ya que existen más alternativas al trabajo dentro de un hospital. Bien lo sabe Alodia Rodríguez, una médica de 24 años que al quedar en la posición 8.037 no pudo elegir ni la especialidad ni el destino que ella quería. “Tenía algunas opciones, no muchas, de elegir, pero por motivos personales he preferido volverlo a intentarlo”, narra a ConSalud.es
“Nadie te prepara para que las cosas salgan mal, exactamente igual que pasa en la vida”
A pesar de que más del 60 % de los aspirantes no obtienen plaza, se trata de un escenario que no se plantea ni desde las universidades ni desde las academias. “Nadie te prepara para que las cosas salgan mal, exactamente igual que pasa en la vida en cuestiones no académicas. Todos estamos preparados para que las cosas salgan según las imaginamos y cuando se tuercen, hay que improvisar”, explica Rodríguez.
Alodia de improvisar sabe un rato largo. No había llegado el día de elegir plaza cuando ya estaba trabajando y ni más ni menos que de médica, en concreto en la residencia de ancianos de Nájera, su ciudad natal. “Encontré la oferta en Infojobs: «se busca médico, media jornada para Residencia de Mayores de Nájera» y pensé: tiene que ser para mí”. Y dicho y hecho, a los pocos días ya estaba incorporada en su nuevo puesto de trabajo.
Si no obtener plaza MIR es un tema tabú en las universidades, no hablemos ya de trabajar en un destino que no sea un hospital. La propia Rodríguez confiesa que no sabe mucho sobre las salidas laborales que existen más allá del MIR, las mutuas y las ambulancias son algunas de ellas.
Al ser un trabajo a media le permite seguir estudiando de cara a volver a presentarse el año que viene, un reto que afronta con “ganas, con muchas ganas”. “Intentaré corregir errores que cometí el año pasado para obtener un resultado un poco mejor. Por el momento no está siento difícil”, confiesa. Todavía quedan muchos meses para el nuevo examen lo que hace que compaginar estudios y trabajo “no esté siendo difícil por el momento”. Pero es prudente y afirma que “conforme avance la preparación se complicará”.
“Hay cosas mucho más importantes en la vida que el mal resultado de un examen”
¿Un consejo para los médicos que el año que viene intentarán obtener una plaza? Rodríguez lo tiene claro. “Que vayan tranquilos. No puedes dejar que 8 meses de estudio, 235 preguntas tipo test y algún que otro contratiempo externo decidan a que te vas a dedicar el resto de tu vida”.
El Ministerio de Sanidad ha acreditado 7.512 plazas para el examen MIR de 2020 pero puede que los aspirantes superen la cifra. Esto quiere decir que un año más miles de jóvenes se verán en la situación de Alodia. Para ellos también tiene un consejo. “Hay cosas mucho más importantes en la vida que el mal resultado de un examen, que se apoyen en las personas que tienen alrededor”. Sus grandes apoyos han sido su familia, su pareja y sus amigas.