Cada vez son más los pacientes transgénero que acuden a la Medicina Estética para feminizar o masculinizar su rostro. Se trata de tratamientos no invasivos y más económicos que las cirugías.
Según el Ministerio de Sanidad, en España hay un total de 1.480 mujeres transexuales y 607 hombres, lo que indica que cada año surgen 61 casos nuevos. Debido a ello, se ha creado la necesidad de crear nuevos protocolos médico-estéticos para ayudar a la población a poder cumplir su transformación y que puedan identificarse con el género que ellos mismos quieran.
Gracias a la Medicina Estética se consigue acentuar los rasgos faciales de forma paralela al proceso hormonal.
La doctora Mª Ángeles López Marín señala que "a través de las hormonas no se consiguen esos rasgos sexuales secundarios como la forma de la cara, sobre todo cuando la transición se ha iniciado a unas edades más avanzadas".
Gracias a la Medicina Estética se consigue acentuar los rasgos faciales de forma paralela al proceso hormonal. En el caso de la feminización facial ‘el objetivo de la toxina botulínica es conseguir que las cejas estén más arqueadas. Y a través del relleno de ácido hialurónico conseguimos unos pómulos más redondeados. Al introducir estrógenos más altos se consiguen unos labios más anchos y jugosos o la nariz más afilada’.
Por el contrario, en el caso de la masculinización “nos vamos a fijar que cuando aplicamos toxina botulínica las cejas sean más rectas, que no tengamos esa elevación ni ese arqueado de cejas. Y con el ácido hialurónico, que los pómulos serán más lateralizados. La barbilla debe ser más prominente, es decir que si tenemos una barbilla estrecha, haremos una barbilla un poquito más gruesa y más ancha para reflejar esa masculinidad, esa proyección de la mandíbula; así como la nariz si la tenemos muy pequeña o excesivamente puntiaguda, hacerla más recta y más firme, más masculina en definitiva”.
Estos procesos se realizan en una hora y es totalmente indoloro. Se aplica anestesia local y se realiza con ácido hialurónico e alta reticulación. "Es importante que el tratamiento se repitauna vez al año ya que el producto es reabsorbible pero de esta forma se van adaptando a los cambios faciales que produzca el tratamiento hormonal", sentencia la doctora Mª Ángeles López Marín.