El tratamiento estrella para una piel luminosa y sin rastro de contaminación

El éxito de este tratamiento radica en utilizar protocolos profesionales basados en los mejores productos de cosmética médica.

Se trata de un tratamiento exclusivo de la clínica de la doctora de Frutos y además se personaliza con cada paciente
Se trata de un tratamiento exclusivo de la clínica de la doctora de Frutos y además se personaliza con cada paciente

La mala calidad del aire tiene efectos probados sobre la salud y la belleza de la piel. Y es que, no solo es el humo que respiramos o la boina negra que puede apreciarse a simple vista en las ciudades, sino que también hay partículas microscópicas en suspensión, que son capaces de atravesar la barrera cutánea y agredir desde dentro.

Por ello, la doctora Pilar de Frutos ha desarrollado en exclusiva un protocolo facial específico, Glowing Skin Antipolución Facial, para contrarrestar los efectos que la creciente contaminación tiene en nuestra piel, como el tono apagado, la sequedad, la irritación cutánea e incluso el envejecimiento prematuro.

Se trata de un procedimiento exclusivo de la clínica de la doctora de Frutos y además se personaliza con cada paciente, con el objetivo de purificar y eliminar las toxinas y los radicales libres responsables del estrés oxidativo y el envejecimiento. También se logra restaurar la actividad celular, devolver la vitalidad natural y restaurar tolerancia a la piel, logrando así que luzca sana y bonita.

La mala calidad del aire tiene efectos probados sobre la salud y la belleza de la piel

El éxito de este tratamiento radica en utilizar protocolos profesionales basados en los mejores productos de cosmética médica. El tratamiento combina las ondas de choque radiales (de la exclusiva marca Storz) con cosmética médica especializada en tratamientos de la piel, como el efectivo retinol de ZO Skin (procedente de Beverly Hills) y el poder antioxidante de los alfa-hidroxiácidos de Skinceuticals (Suiza).

¿Cómo se lleva a cabo el tratamiento? En primer lugar se hace un diagnóstico exhaustivo de las necesidades de la piel. Este comienzo es fundamental, ya que es el que guiará los siguientes pasos del protocolo.

Después se realiza una limpieza profunda para liberar la piel de la primera capa de impurezas con los sistemas hidrafacial o punta de diamante, según el tipo de piel. Así se consigue que el tratamiento posterior penetre mejor.

Se continúa con una sesión de ondas de choque faciales, que consiguen un aumento del flujo sanguíneo en la piel y, por lo tanto, una mayor oxigenación, un aumento de la producción de colágeno y elastina, y la compactación y alineación de las capas celulares.

Se concluye con un tratamiento cosmético adaptado al tipo y a las necesidades de la piel, que a su vez tiene otros tres pasos: un peeling ligero tratante, una mascarilla antioxidante y un sellado con retinol.

Los resultados son visibles de inmediato. El rostro queda instantáneamente luminoso, de aspecto sano y con un tono más uniforme. Las arrugas se atenúan, desaparece la expresión de cansancio y se aprecia una agradable sensación de limpieza y ligereza en la piel.

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