Este es el tratamiento para recibir al año nuevo con la mejor cara

Carmen Navarro nos sorprende una vez más combinando sus mejores técnicas manuales con la energía y la fuerza del Gua Sha.

Tratamiento facial (Foto. Estetic)
Tratamiento facial (Foto. Estetic)
25 noviembre 2020 | 12:00 h

Tal y como refleja la cultura milenaria de Japón, cada uno tenemos nuestro propio Ikigai, una razón para vivir, para seguir adelante y encontrar sentido a nuestra existencia en el día a día. La mejor manera de recibir al año nuevo e iniciarlo recargados de buena energía.

Carmen Navarro nos sorprende una vez más combinando sus mejores técnicas manuales con la energía y la fuerza del Gua Sha, un ritual con piedras de jade y cuarzo rosa, que nos ayuda a ''rascar'' y eliminar toxinas, mientras esculpe con destreza el rostro.

Con los principios activos de Sofia Bertrand, inspirados en la cultura oriental, como la camelia japónica y potenciados con activos de lujo como el rubí, el champagne y la esmerada, este protocolo nos acompañará para recibir al año nuevo manteniendo el estrés bajo control y recargando nuestro organismo de la energía positiva que necesitamos.

PASO A PASO

1. Recibimiento y masaje de bienvenida. Un masaje de reflexoterapia podal y maniobras descontraturantes en hombros, cuello y espalda se encargarán de relajar la musculatura disminuyendo la tensión y preparando cuerpo y mente para disfrutar del tratamiento.

Este protocolo nos acompañará para recibir al año nuevo manteniendo el estrés bajo control y recargando nuestro organismo 

2. Limpieza y peeling enzimático. Preparamos la piel con un peeling con enzimas naturales como la Sófora Japónica, conocido como árbol de las Pagodas, y que estimula los procesos de renovación de la piel. Contiene hasta un 30% de la vitamina P que permite suavizar la piel, estimular su regeneración y regular el balance de lípidos.

3. Masaje. Combinación de maniobras muy precisas de masaje profundo con movimientos y pases de relajación y estimulación. Las manos vuelan sobre el rostro, alternando velocidades lentas, para conseguir la relajación, y rápidas, para estimular y obtener un efecto lifting de impacto. Así como la destreza al desplazar las piedras Gua Sha, recorriendo el rostro, con la precisión de un Samurai, esculpiendo y tratando los puntos de acupuntura, con el fin de liberar toxinas, aumentar la circulación sanguínea, relajar canales y ajustar el balance del ying y el yang.

4. Mascarilla según necesidades de la piel. Calmante, que combina extractos naturales de origen japonés con la Sakura, conocida como la flor de cerezo, Tsubaki, la camelia japónica y el Bambú orgánico con activos de lujo como el extracto de Champagne y Rubí. Calma, hidrata, repara y aporta luminosidad. Reafirmante que combina los extractos de origen amazónico como el Jambu, conocido como el botox natural, el Kahai, un aceite muy valioso por sus beneficios antiedad y activos de lujo como el extracto de Champagne y la esmeralda.

¿Qué conseguimos? Gracias a la estimulación sanguínea eliminamos toxinas acumuladas, tanto a nivel superficial como profundo. Relajamos la musculatura, reafirmamos tejidos, drenamos bolsas y mitigamos la aparición de arrugas. El resultado es una piel luminosa, liberada de estrés, oxigenada y preparada para recibir el nuevo año con energía renovada.

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