Solo quien sufre el roce de los muslos sabe lo incómodo que es y lo difícil que hace ponerse simplemente unos pantalones cortos o vestido cuando empieza el buen tiempo. Una incomodidad que provoca, en ocasiones, la aparición de granitos y heridas.
Al contrario de lo que se piensa, el roce de los muslos no se debe solo al exceso de peso, que también, sino que tal y como señala la doctora Mª Ángeles López Marín, directora del Centro Médico Rusiñol, ''la forma de la pierna y en cómo se acumula la grasa en esta zona, hace que la piel friccione entre sí''.
El roce de los muslos se produce a lo largo de la parte interna de los muslos por fricción entre sí apareciendo los siguientes síntomas: enrojecimiento, lesiones parecidas a ampollas o forúnculos, una erupción plana, sensaciones de ardor, dolor y picazón a medida que la piel se cura
¿Qué hacer ante el roce de los muslos? ''Hay que señalar que el roce de los muslos se produce por un exceso de sudor en el área que da pie a la fricción y ocurre mayoritariamente en la temporada de calor'', aunque ''no solo las mujeres lo padecen, ya que también hay hombres que tienen que lidiar con el roce y sus consecuencias'', añade la doctora.
Solo quien sufre el roce de los muslos sabe lo incómodo que es y lo difícil que hace ponerse simplemente unos pantalones cortos o vestido cuando empieza el buen tiempo
Para evitar este incómodo roce de los muslos, la doctora nos da dos alternativas, una más casera y otra opción médico-estética que está dando muy buenos resultados.
-El talco y la vaselina. Para los paseos o caminatas cortas aplica un poco de talco, sobre todo aquellos que contienen almidón para evitar la sudoración excesiva. Del mismo modo funciona la vaselina (corporal) que crea una capa protectora que impide que la piel se lesione con el roce constante. Tanto la vaselina como el talco pueden ser grandes aliados, sin embargo, su efecto no es duradero. Lo bueno es que pueden llevarse en el bolso o la cartera para aplicarlos en el momento indicado, tantas veces como sea necesario.
-Tratamiento médico estético HIFU. Este es un procedimiento que se aplica con un ultrasonido focalizado de alta intensidad, donde se utiliza un cabezal a cierta profundidad en la piel para actuar en la grasa acumulada, ''es ideal y muy beneficiosa para la parte interna de los muslos, es decir, el lugar donde se produce la fricción'', recalca López Marín.
La técnica HIFU o lipotensado emplea la más avanzada tecnología para tratar la flacidez y destruir las células grasas, convirtiéndola en líquido, para que el organismo la pueda eliminar de manera natural, todo esto sin necesidad de cirugía y sin dolor.
''En el área donde ocurre la fricción, la piel es un poco más fina y con un alto volumen de grasa, con el tratamiento HIFU se logra una reducción de la grasa acumulada, la reafirmación de la piel y se estimula la producción de colágeno. Esto trae como resultado una reducción del volumen del área de roce y así se erradica la incómoda fricción de los muslos, evitando dolor, raspaduras y lesiones en la piel'', finaliza la doctora.