La caída del cabello puede afectar tanto a hombres como a mujeres de cualquier edad a lo largo de sus vidas. De hecho, algunos estudios aseguran que alrededor del 40% de los españoles sufre algún grado de alopecia o pérdida significativa del volumen del cabello, un porcentaje que aumenta hasta el 65% a partir de los 50 años.
Pero, ¿cuáles son los síntomas que nos indican que estamos sufriendo una pérdida de cabello?
Según los expertos de Stop&Grow de Hairdreams, tratamiento especializado en el cuidado del cabello y regeneración capilar, uno de los síntomas principales es cuando el cabello comienza a disminuir su grosor de forma gradual y deja más visible el cuero cabelludo. En el caso de los hombres suele ser la línea de la frente la que comienza a retroceder con el paso del tiempo. Por su parte, las mujeres, y más una vez llegada la menopausia, comienzan a sufrir una separación mayor de la línea central del cabello.
Algunos estudios aseguran que alrededor del 40% de los españoles sufre algún grado de alopecia o pérdida significativa del volumen del cabello
Pero además de una pérdida de grosor, se puede producir un debilitamiento del cabello que haga que se rompa con facilidad o se desprenda del cuero cabelludo sin gran esfuerzo. Para fortalecerlo y recuperar el volumen perdido, Stop&Grow recomienda hacer uso de productos que aporten fuerza y volumen al pelo con el fin de retrasar o evitar su pérdida.
Por otra parte, otro síntoma claro es cuando se produce una caída de más cabello del que crece. Y es que, a menudo se pierden entre 50 y 150 cabellos diarios, una cifra que puede duplicarse en el otoño, sin embargo, si al tirar del mismo se desprenden más de tres pelos o se observan un mayor número de cabellos sobre la cama, en la ducha, la toalla o a lo largo del día, puede considerarse una pérdida anormal del mismo.
Asimismo, otro de los síntomas para detectar la alopecia es cuando aparecen entradas a muy temprana edad. En esto, la predisposición genética juega un papel fundamental e influirá en gran medida en el progresivo desarrollo de las mismas. ''Para detectar que estas cada vez son mayores, lo mejor es hacer un repaso a las fotografías de los últimos años. Este truco ayudará a observar la pérdida sufrida en un corto o largo periodo de tiempo'', explican desde Stop&Grow.