Cuidar la piel es un paso fundamental que todos debemos tener en nuestra rutina diaria, sobre todo cuando esta empieza a experimentar los primeros signos de envejecimiento.
En este sentido, existe una gran cantidad de tratamientos y productos que permiten devolverle a la piel la luminosidad y uniformidad que tenía antes. Uno de ellos es la microdermoabrasión, un procedimiento que exfolia la piel, reduce los signos del envejecimiento y hace que la piel se vea más uniforme.
El objetivo principal de esta técnica es hacer que la tez sea más suave, más brillante y más uniforme en color. De hecho, es un procedimiento que suele utilizarse para tratar la opacidad de la piel, un tono y textura desigual, manchas de la edad, cicatrices y el melasma.
Cuidar la piel es un paso fundamental que todos debemos tener en nuestra rutina diaria, sobre todo cuando esta empieza a experimentar los primeros signos de envejecimiento
Asimismo, los dermatólogos también aconsejan usar la microdermoabrasión para mejorar los resultados de los productos antienvejecimiento, ya que los ayuda a penetrar en la piel.
Por otra parte, como todos los demás tratamientos, la microdermoabrasión también tiene riesgos y efectos secundarios. Por ejemplo, las personas que se han sometido a un tratamiento para eliminar el acné podrían experimentar cicatrices en su piel tras la microdermoabrasión.
De igual forma, tras este procedimiento también se puede experimentar hinchazón en la piel, enrojecimiento, hematomas, sensación de ardor o escozor y mayor sensibilidad de la piel a la luz solar, por lo que es recomendable utilizar protección solar.