En este sentido, durante los últimos años se solía recurrir a una intervención de liposucción para paliar el problema. No obstante, la última tendencia en cirugía estética está desbancando a esta modalidad y nada tiene que ver con la cirugía propiamente dicha… Se trata del Coolsculting, también conocido como criolipólisis, una nueva técnica que congela los acúmulos de grasa sin agujas ni anestesia.
El frío se encarga de atacar las células de grasa y de condensarla para que el cuerpo pueda eliminarla de forma natural
El procedimiento consiste en colocar la parte del cuerpo afectada en un dispositivo que enfría el área por debajo de la temperatura corporal, pero por encima de la congelación. De esta manera, el frío se encarga de atacar las células de grasa y de condensarla para que el cuerpo pueda eliminarla de forma natural.
“Del 20 al 23% de la grasa congelada durante una hora acabará desapareciendo mediante la orina o en las heces”, asegura el doctor Renato Saltz, cirujano plástico y presidente de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS)
La técnica no requiere recuperación o un periodo de inactividad, y cuenta con un efecto reafirmante que evita la flacidez gracias a que promueve la producciónde colágeno. Además, los resultados son visibles desde la primera sesión.
“De lo que no cabe duda es de que las tendencias están lejos de las cirugía, éstas se dirigen a procedimientos mínimamente invasivos que no requieren anestesia, ofrece una recuperación más rápida y plantean menos riesgo”, ha concluido el doctor Saltz.
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