Como buenas fuentes de fibra apuntaron a las nueves, las legumbres, la fruta y los granos enteros
El estudio parte de una colaboración entre la Universidad de Tufts en Boston y la Universidad de Manchester con el objetivo de analizar el vínculo entre la osteoartritis y la ingesta de fibra, para lo que investigaciones anteriores ya han demostrado que una dieta rica en este compuesto baja la presión arterial, fomenta el adelgazamiento, reduce la inflamación, y mejora los niveles de azúcar en sangre.
En este contexto, los investigadores examinaron a miles de participantes utilizando un cuestionario de frecuencia de alimentos para realizar un seguimiento clínico de cada uno de ellos durante 48 meses.
Además, también recopilaron datos clínicos sobre otros factores que pueden haber influido en los resultados, como las lesiones, medicamentos, consumo de alcohol y estilo de vida.
Tras cuatro años de investigación, el estudio concluyó así, a partir de las estadísticas porcentuales, que una mayor ingesta de fibra suponía un menor riesgo de osteoartritis. Como buenas fuentes de fibra apuntaron a las nueces, las legumbres, la fruta y los granos enteros.
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