Ante el aluvión de consultas y fuerte demanda de esta intervención, Clínicas Dorsia y su equipo de expertos despejan dudas sobre la cirugía de pecho, que sigue siendo la operación estética más practicada en nuestro país.
A priori puede parecer que se trata únicamente de aumentar el tamaño, pero la realidad es que existen múltiples tratamientos relacionados con las mamas, que van desde la reducción de pecho a su elevación o cambio de prótesis.
Capaz de devolver la confianza, autoestima y bienestar a una mujer, lo fundamental al respecto es saber qué tipo de resultados ofrece cada una opción para decidir, junto al experto, la más adecuada para que el resultado sea todo un éxito.
Empecemos por el aumento de senos, ya que es el subtipo que más se demanda en España. Además de todos aquellos casos que deseen alterar el pecho que naturalmente tienen por criterios personales, la paciente indicada para realizarse un incremento de pecho es aquella que, tras el embarazo, la lactancia o una gran pérdida de peso, haya visto reducido el volumen y desee recuperar el tamaño y la forma.
Existen múltiples tratamientos relacionados con las mamas, que van desde la reducción de pecho a su elevación o cambio de prótesis
En Clínicas Dorsia, las pacientes piden, sobre todo, que el resultado sea un pecho natural y firme. Tras una valoración personalizada y minuciosa de cada caso, el equipo de expertos cirujanos eligen cuáles son las mejores prótesis para cada paciente. Para ello, examinan la forma previa de los senos (especialmente si se tratara de una tipología tuberosa caracterizada por la forma de pico del mismo) y, por supuesto, los resultados finales que se desean alcanzar.
En base a esta evaluación, existen varias prótesis y técnicas indicadas, entre las que destaca el aumento de pecho con B-lite exclusivo de Clínicas Dorsia, en el que se usan implantes más ligeros pensando en deportistas o gente muy activa, cual busca más comodidad y menor impacto durante sus entrenamientos o vida diaria.
En pacientes operadas previamente de aumento mamario, existen diferentes motivos por los que resulte necesario extraer las prótesis antiguas para ser reemplazadas.
Por un lado, el deseo de un cambio de forma o tamaño de los senos. Las intervenciones mamarias han evolucionado mucho en los últimos veinte años, tanto en técnica como en materiales utilizados, por lo que existen casos en los que un resultado que antes no era posible se ve facilitado por el avance de la medicina. Además los estándares de belleza fluctúan tanto como el momento vital o gustos personales de cada uno, lo que puede alterar el objetivo buscado.
En pacientes operadas previamente de aumento mamario, existen diferentes motivos por los que resulte necesario extraer las prótesis antiguas
Por otro lado, por una complicación que se produce ocasionalmente tras la cirugía de mamas. Aparece como una reacción cicatricial ante el implante por la que la mama se vuelve dura y en muchos casos dolorosa al tacto. Así, debe ser reemplazada o eliminada cuanto antes.
Finalmente, por ruptura protésica o defecto en la misma. Las probabilidades de que esto ocurra son bajas, ya que en Clínicas Dorsia trabajan con prótesis de máxima calidad y con garantía de por vida. Sin embargo, existe un espectro de la población afectada por ello que busca en nuestros centros una solución mediante una cirugía secundaria que subsane los posibles daños.
La elevación de pecho o mastopexia es una cirugía pensada para una mama ''descolgada''. La caída del pecho puede tener origen congénito, adquirido (cambios bruscos de peso de forma repetida, el embarazo y la lactancia) o simplemente debidos al proceso de envejecimiento, en el que los ligamentos y la piel del seno se distienden. El objetivo de esta intervención es devolver el aspecto terso y juvenil al escote, lo cual no implica obligatoriamente incluir una prótesis de aumento.
Si se desea disminuir de tamaño del pecho se llevaría a cabo una mamoplastia de reducción. La reducción y la remodelación del pecho se consiguen mediante la extirpación de piel, tejido mamario y tejido graso a través de una incisión que, aunque será visible, se diseña para que apenas se aprecie.
Para que el resultado de cualquier intervención sea óptimo tienen que llevarse a cabo unos cuidados posteriores que garanticen el éxito a todos los niveles. En el caso del pecho se hace aún más relevante, por la delicadeza de la zona.