Janssen ha anunciado los resultados de un análisis conjunto de pacientes con linfoma de células del manto (LCM) recaída/refractario (r/r) tratados con ibrutinib, comercializado como Imbruvica. Los datos de seguimiento ampliados demuestran que los pacientes tratados previamente (en la primera recaída) con ibrutinib obtienen los mejores resultados clínicos en cuanto a eficacia y tolerabilidad. Estos datos se presentaron en una comunicación oral en el 59º congreso anual de la American Society of Hematology (ASH) en Atlanta, GA. Ibrutinib, el primer inhibidor de la tirosina quinasa de Bruton (BTK), está desarrollado y comercializado conjuntamente por Janssen Biotech, Inc. y Pharmacyclics LLC, una empresa de AbbVie.
“Los datos de este amplio grupo de ensayos clínicos, con prolongación del seguimiento, respaldan el uso precoz de ibrutinib en pacientes con linfoma de células del manto en recaída o refractario”, manifiesta Simon Rule, M.D., profesor de hematología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Plymouth, Reino Unido, e investigador principal y presentador del análisis conjunto.
“El seguimiento a largo plazo para ibrutinib demuestra que, además de la eficacia, los acontecimientos adversos nuevos disminuyen con el tiempo"
Además, añade este especialista, “el seguimiento a largo plazo para ibrutinib demuestra que, además de la eficacia, los acontecimientos adversos nuevos disminuyen con el tiempo y son en general menos frecuentes cuando se trata antes a los pacientes”.
El LCM es un tipo de linfoma no hodgkin (LNH) de linfocitos B y representa aproximadamente el 5% a 7% de los linfomas malignos en Europa occidental. El LCM suele comenzar con aumento de tamaño de los ganglios linfáticos y puede extenderse a otros tejidos, como la médula ósea y el hígado. La mediana de la supervivencia global de los pacientes con LCM es de tres o cuatro años.