Un estudio publicado en la revista científica Environmental Science & Technology Letters, revela que un equipo de investigadores ha descubierto que los retardantes de llama halogenados, agregados a las cajas de plástico que conforman las televisiones, pueden pasar del éstas al aire, a las manos de los usuarios y llegar a los smartphones.
Una vez en el teléfono inteligente, se proporciona una fuente continua de exposición a estos químicos cada vez que toca el sistema electrónico, lo que puede suponer un perjuicio constante para la salud de los usuarios.
"Nuestro estudio muestra que los químicos tóxicos como los retardantes de llama hacen lo mismo. Esa es otra razón por la que todos debemos lavarnos las manos a menudo y con la suficiente calidad"
"Es bien sabido que los virus se transfieren entre las superficies y las manos", ha dicho la coautora Miriam Diamond, profesora del Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Toronto (Canadá).
Tal y como ha agregado la propia docente, "nuestro estudio muestra que los químicos tóxicos como los retardantes de llama hacen lo mismo. Esa es otra razón por la que todos debemos lavarnos las manos a menudo y con la suficiente calidad".
Se sabe que los retardantes de llama halogenados representan un riesgo para la salud de los niños. Estudios anteriores han encontrado que la exposición a estos químicos puede causar un cociente intelectual más bajo en los niños, así como problemas de comportamiento.