La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha desarrollado una herramienta especial para determinar qué enfermedades son las prioritarias para investigar sobre ellas ante futuros contextos de emergencia de salud pública. Se basa en localizar aquellas patologías que representan dicho riesgo por su potencial epidémico y para las que son insuficientes las medidas que en la actualidad se toman para combatirlas. Entre las más destacadas se encuentran la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, el virus del Ébola o el zika.
La OMS también incorpora a esta lista la patología que denomina ‘enfermedad X’, que representa una posible epidemia internacional grave causada por un patógeno desconocido. Los expertos han considerado varias enfermedades adicionales como fiebres hemorrágicas o chicungunya, entre otras.
Todas estas enfermedades plantean riesgos importantes para la salud pública y por lo tanto es necesaria una mayor investigación para mejorar su vigilancia y diagnóstico
Todas ellas plantean riesgos importantes para la salud pública y por lo tanto es necesaria una mayor investigación para mejorar su vigilancia y diagnóstico. Los medicamentos y las vacunas existentes necesitan mejoras adicionales para varias de las enfermedades consideradas pero no incluidas en la lista de prioridades.
En estos estudios también se han dirigido esfuerzos para abordar la resistencia antimicrobiana a través de iniciativas internacionales específicas. Se trata de uno de los problemas más destacados que suponen un verdadero peligro para la salud pública de todos los países.