El presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ha confirmado este miércoles 8 de julio en el Parlament el uso obligatorio de la mascarilla en toda la región, aunque pueda mantenerse la distancia de seguridad. Según lo anunciado la medida entrará en vigor el jueves 9 de julio.
Una decisión que se traduce en el endurecimiento de las recomendaciones sobre el uso de las mascarillas como elemento para reducir los contagios por SARS-CoV-2. De esta forma los catalanes estarán obligados a llevar puesta la mascarilla en todo momento tanto en la calle como en los espacios públicos, independientemente de si puede o no mantenerse la distancia mínima de seguridad fijada en 1,5 metros por el decreto de “nueva normalidad”.
Los catalanes estarán obligados a llevar puesta la mascarilla en todo momento tanto en la calle como en los espacios públicos, independientemente de si puede o no mantenerse la distancia mínima de seguridad fijada en 1,5 metros
La propuesta fue realizada el pasado lunes por la consejera de Salud, Alba Vergés, tras el brote registrado en Lleida y que ha obligado a confinar a más de 200.000 personas en la comarca de El Segriá. Una situación sobre la que han mostrado su preocupación tanto las autoridades sanitarias como el ministro de Sanidad, Salvador Illa.
En este sentido Torra ha defendido que el Gobierno de Cataluña “está 24 horas al día mirando lo que está pasando en los hospitales de Lleida, haciendo medidas de rastreo y de protección”, manifestando su intención de descentralizar la gestión de la citada zona confinada para que los ayuntamientos puedan contar con todo el apoyo que requieran.