El Servicio de Información del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses ha informado esta semana de la detección de un incremento de las consultas telefónicas por intoxicaciones como consecuencia de la combinación de distintos productos de limpieza. El origen de estas reside en la peligrosa mezcla de determinados productos para la desinfección del hogar que tienen por objetivo reducir la posibilidad de contagios del SARS-CoV-2.
Durante el pasado mes de marzo y en las dos primeras semanas de abril se han producido un total de 1.655 consultas telefónicas. Una cifra que se traduce en un incremento cercano al 15% respecto al mismo periodo de 2019.
De estas consultas, 1.846 han guardado relación con intoxicaciones producidas por la combinación de lejía con otros desinfectantes de superficies. En el 26,1% de los casos la lejía había sido mezclada con amoníaco, aunque se han registrado consultas por su uso conjunto con otros productos como vinagre, alcohol, salfumán, anticalcáreos, lavavajillas y otros limpiahogares.
La mezcla de amoníaco y lejía es la más habitual. Esta tiene como resultado una reacción química que genera un gas denominado cloramina (NH2Cl). Este es muy tóxico y, al entrar en contacto con las mucosas, se descompone produciendo ácido clorhídrico, muy tóxico y corrosivo.
1.846 han guardado relación con intoxicaciones producidas por la combinación de lejía con otros desinfectantes de superficies
Desde el instituto Nacional de Toxicología recuerdan que la combinación de algunos de estos productos destinados a la limpieza del hogar puede causar cuadros toxicológicos tanto a nivel respiratorio (rinitis, tos, disnea o irritación faríngea y laríngea) como dermatológicos (irritación de piel, picor, inflamación o rubefacción).
¿CÓMO DEBEMOS DESINFECTAR?
Los coronavirus humanos (no SARS-CoV-2) se inactivan de forma eficiente en presencia de etanol al 62-71%, hipoclorito de sodio 0,1-0,5% y glutaraldehido 2%, con una reducción de 2-4 log10 tras un minuto de exposición, mientras que cloruro de benzalconio al 0,04%, hipoclorito de sodio al 0,06% y orto-ftaladehído al 0,05% serían menos efectivos.
Según la información ofrecida por el Ministerio de Sanidad, en condiciones experimentales, el nuevo SARS-CoV-2 se redujo en 4-6 log10 a los cinco minutos de aplicar lejía casera en concentraciones de 1:49 y 1:99, etanol 70%, povidona yodada 7,5%, cloroxylenol 0,05%, clorhexinina 0,05%, cloruro de benzalconio 0,1%, y solución de jabón líquido en concentración de 1:49.
SUPERVIVENCIA DEL VIRUS EN SUPERFICIES
Sanidad informa que con una temperatura por encima de los 22 grados centígrados y con un 60% de humedad, el SARS-CoV-2 solo permanece activo tres horas en superficies de papel.
En ambientes en los que la temperatura se mueve entre los 21-23 grados centígrados y con un 40% de humedad, el virus puede permanecer activo hasta cuatro horas en superficies como el cobre, 48 horas en acero inoxidable y hasta 72 horas en el caso del plástico.
Cabe señalar que, en superficies de madera, la ropa o el vidrio, el virus puede sobrevivir entre uno y dos días de media. Una capacidad de supervivencia que se eleva hasta los cuatro días en el caso del plástico, el acero, los billetes y las mascarillas quirúrgicas.