El coronavirus destapa la precariedad que sufren los médicos chinos

Más de 1.700 trabajadores sanitarios se han contagiado y seis han muerto desde que se declaró el brote.

El número de contagios por coronavirus sigue aumentando (Foto. Freepik)
El número de contagios por coronavirus sigue aumentando (Foto. Freepik)
CS
21 febrero 2020 | 14:15 h

La epidemia de coronavirus ha disparado la demanda de atención sanitaria en China y con ello ha puesto de manifiesto uno de los grandes agujeros del sistema sanitario del país: la escasez de médicos en centros de salud y hospitales. A pesar de que el número de profesionales con licencia se ha duplicado en los últimos diez años, el problema se mantiene porque el número de ingresos hospitalarios ha sido cuatro veces mayor en el mismo periodo de tiempo. La situación ha empeorado con el brote de coronavirus, tal y como informa la agencia Reuters.

“Cada vez hay menos médicos para ver a más pacientes”, lamenta Scott Rein, asesor de operadores de hospitales y grupos de médicos en el país. “Un médico puede llegar ver a más de 100 niños en una mañana”, confirma el pediatra Jane Xiao. Esta precariedad genera una enorme sobrecarga de trabajo a los médicos pero además pone en riesgo su seguridad en las consultas. ¿Por qué?

“Los pacientes se frustran porque no reciben la atención que necesitan y convierten esa frustración en agresiones físicas y verbales hacia los profesionales sanitarios”, advierte la Asociación China de Médicos. “Todos los médicos han experimentado algún tipo de abuso”, confirma a Reuters He Jiye, un cirujano ortopédico de Shanghai. El último suceso grave se produjo el pasado diciembre cuando un hombre mató a un médico en hospital de Beijing al no llegar a un acuerdo sobre los ciudados que debía recibir su madre.

EXPUESTOS AL CORONAVIRUS

La muerte el 7 de febrero de uno de los primeros doctores en llamar la atención sobre la epidemia, a la que se ha sumado la del director de un hospital de Wuhan esta semana, han llamado la atención sobre los riesgos que enfrentan quienes tratan la enfermedad. Los datos hablan por sí solos: más de 1.700 profesionales se han contagiado y seis han muerto, según el último informe presentado por la Comisión Nacional de Salud.

En las últimas semanas, las agencias de noticias estatales chinas se han hecho eco de las agotadoras condiciones en las que trabajan los médicos que luchan contra la epidemia. También las redes sociales se han volcado en visibilizar la precariedad. Una publicación del 14 de febrero en la plataforma Weibo, similar a Twitter, decía: “Esta epidemia ha demostrado la falta de recursos de nuestro sistema médico. Si a esto le sumamos los ataques violentos contra los médicos en los últimos años, cada vez habrá menos personas dispuestas a estudiar medicina”. 

Aunque China tiene atención médica pública y privada, la mayoría de los mejores médicos se encuentran en hospitales públicos, que atraen a la mayoría de los pacientes. Los médicos advierten que “aunque el gobierno ha tratado de aliviar la presión sobre los hospitales públicos permitiendo que sus médicos trabajen también en clínicas privadas, la realidad es que algunos hospitales despiden a aquellos que deciden optar por esta combinación”.

Pagar es otro problema. Solo el 8,1% de los trabajadores médicos están contentos con sus salarios, según una encuesta de 2018 realizada por DXY, una plataforma china en línea para información de salud. Esto provoca que los mejores estudiantes de medicina renuncien a ejercerla y se orienten a otras profesiones o empresas de la industria farmacéutica. 

 

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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