Fiebre hemorrágica Crimea-Congo: ¿cuál es el riesgo real para España?

Sanidad afirma que los riesgos de que se produzcan más casos esporádicos de fiebre hemorrágica Crimea-Congo en zonas con presencia de garrapatas del género Hyalomma, “se considera moderado”.

Garrapata (Foto: Pixaby)
Garrapata (Foto: Pixaby)
Ángel Luis Jiménez
8 agosto 2022 | 17:45 h

El Ministerio de Sanidad ha confirmado en julio de 2022 dos casos de fiebre hemorrágica Crimea-Congo (FHCC) en dos hombres residentes en la comarca del Bierzo. El virus de la FHCC (VFHCC) es transmitido principalmente por las garrapatas del género Hyalomma y también se puede producir transmisión de persona a persona a través del contacto con la sangre o secreciones de un enfermo. La FHCC se manifiesta clínicamente con fiebre, cefalea, dolores musculares y en pocos casos evoluciona hacia formas graves con manifestaciones hemorrágicas. No hay tratamiento específico, según informa Sanidad a través de la actualización de casos emitida el pasado 5 de agosto.

El primero de estos casos es un hombre de 49 años, cazador, con antecedentes de picadura por garrapata que inició los síntomas el pasado 12 de julio y se encuentra en situación estable. El segundo caso se trata de un hombre de 51 años que fue diagnosticado retrospectivamente el 20 de julio tras haber fallecido el 19 de junio por causa desconocida con sospecha e intoxicación por compuestos de azufre.

En la península ibérica, Hyalomma marginatum y Hyalomma lusitanicum son las especies más abundantes de este género de garrapatas. La circulación del virus en nuestro país se conoce desde el año 2010. Entre 2013 y 2022 se han confirmado un total de 12 casos con cuatro fallecimientos en España: uno en 2013 en Ávila, dos  en 2016, uno de ellos en Ávila y un caso secundario a este en un trabajador sanitario, dos en 2018 en Badajoz y Salamanca, tres en 2020 en Salamanca, dos en 2021 en Salamanca y León (el Bierzo) y dos en 2022 en León (el Bierzo).

Dado el número de casos que se han confirmado a lo largo de los últimos años se han desarrollado estudios en garrapatas y animales silvestres y domésticos con el objetivo de conocer la extensión de la circulación del virus, de esta forma se ha detectado la circulación extensas áreas de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía. Mediante estudios de serologías realizados en animales también se ha detectado recientemente en Galicia y Cataluña.

Se ha detectado la circulación extensas áreas de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía. Mediante estudios de serologías realizados en animales también se ha detectado recientemente en Galicia y Cataluña

“La provincia de León y en particular la comarca del Bierzo se consideraba de bajo riesgo, dada la baja presencia de Hyalomma y la baja prevalencia de anticuerpos frente al virus en animales silvestres y domésticos en los estudios serológicos realizados, en los que se situaba en torno al 1-2%”, expone el documento de Sanidad en relación a los dos últimos casos identificados.

¿CUÁL ES EL NIVEL DE RIESGO?

De acuerdo con la información recogida en el referido informe de Sanidad el riesgos de que se produzcan más casos esporádicos de fiebre hemorrágica Crimea-Congo en aquellas zonas en las que hay presencia de garrapatas del género Hyalomma, especialmente para la población que resida o frecuente dichas zonas y que realice actividades que supongan una mayor exposición a las picaduras, “se considera moderado”.

“El impacto de la enfermedad se considera bajo dado que, aunque pueda ser en un bajo porcentaje de infecciones una enfermedad grave, el número de personas afectadas no sería elevado y se dispone de medios adecuados de aislamiento y control de los casos”, señala el documento.

En materia de recomendaciones es fundamental intensificar las medidas de salud pública en aquellas áreas con presencia identificada del virus, especialmente en la zona en la que se han detectado los casos más recientes. Se pide enfatizar las recomendaciones a la población sobre la prevención y el manejo de picaduras de garrapatas, vigilancia activa y pasiva de casos, así como estudio entomológico y de circulación del virus tanto humanos como en animales.

FIEBRE HEMORRÁGICA CRIMEA-CONGO

Hablamos de una de las enfermedades transmitidas por garrapatas con mayor extensión a nivel mundial. Esta afecta principalmente a la población de diversas partes de África, Asia, Europa del este y Oriente Medio.

“El impacto de la enfermedad se considera bajo dado que, aunque pueda ser en un bajo porcentaje de infecciones una enfermedad grave, el número de personas afectadas no sería elevado y se dispone de medios adecuados de aislamiento y control de los casos”

El agente productor de la enfermedad es el VFHCC, transmitido por la picadura de garrapatas duras (Ixodidae), principalmente del género Hyalomma. El diagnóstico se realiza mediante aislamiento del virus, detección de genoma por PCR (método específico, sensible y rápido) o serología (los anticuerpos IgM e IgG se detectan mediante ELISA y ensayos de inmunofluorescencia desde unos siete días tras el inicio de la enfermedad).

Tal y como hemos visto la infección en los seres humanos puede producirse bien por la picadura de la garrapata, que actúa también como reservorio, o por el contacto directo con secreciones o fluidos de un hospedador animal infectado durante la fase aguda. Puede haber transmisión de persona a persona por contacto directo con sangre, secreciones, otros fluidos corporales o aerosoles de individuos infectados o con objetos inanimados contaminados, que ocurre con mayor frecuencia en personal sanitario, aunque algunos estudios indican que esta transmisión con las medidas de protección adecuada, es infrecuente.

El periodo de incubación varía entre cinco y seis días. Transcurrido este la mayoría de los casos sintomáticos presentan una clínica leve de entre cuatro y cinco días de evolución caracterizada por fiebre, cefalea, mialgias y mareos. En pocos casos, la enfermedad progresa hacia un cuadro clínico grave con manifestaciones hemorrágicas en piel y mucosas, como petequias o sangrado, que puede progresar hasta la muerte.

La evidencia con la que se cuenta revela una tasa de letalidad de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo entre el 3-40%.

Los estudios serológicos realizados en países endémicos indican que la infección en el ser humano puede cursar de forma asintomática, si bien es difícil establecer en qué porcentaje. “Se desconoce si la infección produce inmunidad frente al virus, aunque no se han identificado casos de reinfección por VFHCC”, recoge el documento de Sanidad.

No hay vacuna para esta enfermedad ni un tratamiento específico, aunque se ha usado la ribavirina con aparente efecto beneficioso.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
Lo más leído