La osteoporosis es una enfermedad crónica y progresiva que se caracteriza por una disminución de la masa ósea y un deterioro de los huesos. Estos se vuelven porosos, frágiles y propensos a fracturarse.
Existen varios factores de riesgo relacionados con la aparición de osteoporosis. Entre ellos, hay una serie de factores que no se pueden controlar, como la edad, el sexo, los antecedentes familiares o el padecer otra enfermedad como la artritis reumatoide, la diabetes, la enfermedad celiaca o la enfermedad inflamatoria intestinal, que pueden predisponer a una mayor probabilidad de padecer osteoporosis. Estos factores no se pueden modificar, pero, identificarlos a tiempo permite conocer el riesgo de esa persona de sufrir osteoporosis y tomar medidas, tanto farmacológicas como no farmacológicas, para prevenir o disminuir su impacto.
Por otro lado, hay una serie de factores modificables que influyen en la calidad del hueso y, abordándolos correctamente, pueden ayudar a prevenir la osteoporosis.
Hay una serie de factores modificables que influyen en la calidad del hueso y, abordándolos correctamente, pueden ayudar a prevenir la osteoporosis
La dieta y el ejercicio son dos de los factores modificables relacionados con la osteoporosis. Mantener una dieta sana y equilibrada, con un aporte de calcio y vitamina D adecuada, además de mantenerse activo, es esencial para mantener una buena salud ósea. Además, hay ciertos hábitos que es recomendable evitar ya que tienen un impacto negativo en el hueso y aceleran la pérdida del mismo, como es fumar y el alcohol.
Por ello, los expertos señalan que la mejor manera de prevenir la osteoporosis es identificar a aquellas personas que pueden estar en riesgo de tener esta enfermedad y así evitar posibles fracturas en el futuro.
Accede aquí para saber más sobre la osteoporosis.