Una mujer valencianoparlante ha sido la última persona en sufrir un caso de discriminación lingüística; en esta ocasión, en Sant Vicent del Raspeig, Alicante. Y es que, un sanitario se negó a atenderla cuando la paciente le pedía, en valenciano, que la asistieran.
Sucedió cuando la madre de la paciente llamó al servicio de urgencias médicas del 112 para que enviaran a su domicilio una ambulancia. A su llegada, la joven se acercó a los sanitarios para comentarles lo sucedido a lo que uno de ellos le respondió: ''¿Qué dice? Háblame en castellano''.
La chica, que quería que le midiesen las pulsaciones porque tenía ansiedad y le dolía el corazón, se negó a hablar en castellano mientras que el sanitario le decía que no la entendía
La chica, que quería que le midiesen las pulsaciones porque tenía ansiedad y le dolía el corazón, se negó a hablar en castellano mientras que el sanitario le decía que no la entendía. Pero no era cierto, ya que este contestaba a todo lo que la paciente le decía.
El sanitario, lejos de preocuparse por la salud de la mujer, le contestó exaltado: ''¡Viva España, viva el rey, viva el orden y la ley''.
Por todo ello, desde la ''Plataforma per la Llengua del País Valencià'' reclaman de manera ''urgente'' que se garantice la competencia lingüística de todas las personas que se dedican al sector sanitario en Valencia y que se organicen cursos de valenciano. Estas dos exigencias ya han sido enviadas tanto al alcalde de San Vicent del Raspeig, el socialista Jesús Villar, como al Sindic de Greuges y a la consejera de Sanidad, Ana Barceló.
El delegado de la plataforma en la Comunidad Valenciana, Manuel Canceller, ha explicado que ''en un servicio público como es el caso uno no puede actuar desde el prejuicio ideológico''.