La Tarjeta Sanitaria Europea es la herramienta del sistema de salud de la Unión Europea con la que cualquier ciudadano de la región puede tener acceso a las prestaciones de otros países en los que esté de viaje, siendo reembolsado por el país de origen. Estas prestaciones se han ampliado también en algunos países a las necesidades desarrolladas por la Covid-19.
En diferentes países europeos, el sistema de salud sufraga parte de la atención sanitaria, fármacos o pruebas. Con la pandemia también se ha visto cómo los sistemas de salud cubren mascarillas, test PCR o de antígenos, necesarios durante la pandemia para evitar su avance, diagnosticar los casos y asegurar el control de esta enfermedad que ha mantenido en jaque a la sociedad mundial.
Así, Francia durante parte de la pandemia cubría la realización de pruebas PCR a aquellos que lo necesitaran presentando la Tarjeta Sanitaria Europea. Desde el 7 de julio de 2021, este tipo de pruebas son de pago para los turistas, salvo aquellos que lo requieran por prescripción médica tras ser contacto de un positivo y cuenten con la tarjeta.
En Suiza, por su parte, la PCR solo está cubierta si se presenta síntomas, si existe una prescripción médica o si eres contacto de un caso confirmado
En Suiza, por su parte, la PCR solo está cubierta si se presenta síntomas, si existe una prescripción médica o si eres contacto de un caso confirmado. No lo cubre, sin embargo, en caso de que se haya de volver al país de origen, en este caso España, y se precise de una prueba PCR negativa para entrar al país.
La tarjeta cubre los diferentes elementos que el sistema de salud de los países financie, y en el caos de la Covid algunos países han cubierto el acceso a las mascarillas o a las pruebas PCR. En cada país europeo ha invertido diferentes cantidades en la atención de la pandemia. Con una media en la Unión Europea de 112 euros de gasto por persona, España ha gastado 200 euros, mientras Alemania 302 euros, Francia 108 euros o Italia 101 euros. Ahora, con la eliminación de gran parte de las restricciones como Dinamarca o Finlandia, estas prestaciones están cambiando y muchas están desapareciendo de la Tarjeta Sanitaria Europea.