Hoy, 12 de marzo, es el Día Europeo Contra las Agresiones a Profesionales Sanitaros, una cita que ha aprovechado el Consejo General de Enfermería (CGE) para pedir al Gobierno de España que endurezca las penas contra los agresores. Y es que a día de hoy, denuncia Diego Ayuso, secretario general del CGE y director del Observatorio de Agresiones, al agresor le sale “muy barato” atacar al profesional sanitario, una de las principales razones por las cuales las agresiones no dejan de aumentar cada año: según los últimos datos del citado Observatorio, en 2023 se denunciaron un total de 2.840 agresiones a enfermeras en España, un 10% más que el año anterior.
Es por ello que Florentino Pérez Raya, presidente del CGE, ha pedido al Ministerio de Sanidad que “presione” al Gobierno para el endurecimiento de las penas a los agresores de las enfermeras. “Las enfermeras y enfermeros de España se enfrentan cada día a hacer su labor con una presión asistencial brutal debido al déficit crónico de profesionales que arrastra nuestro país. De hecho, hacen falta más cien mil enfermeras para equipararnos a nuestros vecinos europeos. Soportan estrés, condiciones laborales infames, el menosprecio de la Administración… Todo ello por su vocación del cuidado de los pacientes”, critica Pérez Raya.
Según los datos de la Policía Nacional, recuerda Ayuso, el 20% de los agresores reincide pese a la condena, que en algunos casos han llegado a ser de cuatro meses de prisión a un año, con multas de 400 a 600 euros: “Si bien es cierto que desde hace años se tipifican como delito de atentado a la autoridad, las penas son tan bajas que apenas tienen repercusión”, apunta el secretario general del CGE. “Hay límites que no se pueden traspasar, porque la abnegación de nuestras profesionales no implica soportar vejaciones ni agresiones. Con la violencia, ya sea verbal o física, debemos tener tolerancia cero. No hay justificación alguna para sentir miedo, sufrir lesiones o amenazas ni vejaciones cuando uno simplemente desempeña su labor en su puesto de trabajo. Y menos cuando su trabajo consiste en salvar vidas, en cuidar de la salud de las personas”, añade Florentino Pérez Raya.
“Hay límites que no se pueden traspasar, porque la abnegación de nuestras profesionales no implica soportar vejaciones ni agresiones"
De las mencionadas 2.840 agresiones registradas a enfermeras en 2023, Andalucía es la que ha registrado más, con 752, seguida de Baleares (369), Aragón (242), Castilla y León (232) y Galicia (212). Por el contrario, las regiones que menos agresiones han notificado son Ceuta (3) Melilla (3), Extremadura (14), Comunidad Valenciana (15) y Madrid (30). “Estos datos no reflejan el total de las agresiones reales. Sabemos que hay una infra notificación de incidentes violentos en nuestros centros sanitarios, especialmente cuando se refieren a insultos y amenazas, porque no se denuncian”, matiza Ayuso.
Por eso, desde el Consejo General de Enfermería insisten en la necesidad de denunciar las agresiones, ya sean físicas o verbales, ya que lo que no se denuncia no se conoce, “y por tanto no existe”. “La agresión supone mucha frustración, mucha preocupación, también le puede provocar una baja laboral y afectarle a nivel profesional en la forma desarrollar su actividad, pues muchas veces quien sufre una agresión piensa que ha hecho algo mal, cuando realmente es una situación que no tiene que ver con la actitud o con la profesionalidad de esa compañera, sino que el estrés y la ansiedad que padece un paciente o un familiar por no ver satisfechas sus expectativas por la deficiencias del sistema y no por la actuación concreta de un profesional”, asegura Diego Ayuso.
APOYO PROFESIONAL
Por eso, para ofrecer su apoyo en materia de prevención, CGE cuenta desde 2023 con un plan integral de prevención, realizado en colaboración con Policía Nacional. Este plan integral incluye un curso formativo gratuito, impartido por el Instituto Superior de Formación Sanitaria (ISFOS), de 20 horas de duración, en colaboración con el equipo de interlocutor policial sanitario. En él han participado más de 5.000 enfermeras, que han trabajado aspectos como la normalización de la violencia verbal, la importancia de la denuncia como forma eficaz de prevenir la violencia y técnicas concretas en el ámbito de la comunicación verbal y no verbal, además de tratar la detección precoz de la conducta agresiva.
"Las enfermeras y enfermeros no están solas, y ante cualquier agresión, amenaza, insulto o acoso van a encontrar todo el apoyo en sus colegios profesionales"
Se trata de una formación online que está estructurada en 7 temas que cuentan con material escrito y el apoyo audiovisual de píldoras formativas en formato vídeo para que el alumno pueda realizar un estudio pormenorizado. La matrícula para la tercera edición de esta formación gratuita se podrá realizar en lapágina web de ISFOS y dará comienzo el próximo 20 de marzo. Entre los materiales elaborados para este curso se incluye una infografía y un vídeo animado con los principales consejos para evitar las agresiones a enfermeras. En ellos se refleja cómo prevenirlas, qué hacer durante el incidente, cómo actuar en visitas domiciliarias y qué hacer después de la agresión. También se ofrece información sobre el Interlocutor Policial Sanitario.
“Con estas acciones queremos dejar muy claro a las enfermeras y enfermeros que no están solas, que ante cualquier agresión, amenaza, insulto o acoso van a encontrar todo el apoyo en sus colegios profesionales, en el Consejo General de Enfermería y, por supuesto, en la Policía Nacional, la Guardia Civil y otros cuerpos autonómicos”, incide Florentino Pérez Raya. Como complemento, Canal Enfermero, la televisión en YouTube del Consejo General de Enfermería, cuenta con un espacio de “Cuídate con tu enfermera”, en el que se recrean distintas situaciones de una consulta de enfermería, y en el que la enfermera Silvia Fernández da las claves para prevenir y actuar frente a una agresión. En él se incluyen consejos para las enfermeras que pueden ser útiles en cualquier centro de trabajo.