La normativa española regula los aspectos más básicos de los establecimientos sanitarios cediendo la legislación específica a los estatutos de cada autonomía. En el caso de Cataluña, el uso de símbolos de la farmacia comunitaria como la cruz verde o la propia palabra farmacia, incluidos sus prefijos y sufijos, no están regulados en la ordenación farmacéutica, como si lo hacen otras regiones como Canarias.
En este contexto, la Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña (Fefac) reclama un cambio de legislación al detectar el uso de los citados símbolos fuera de la farmacia comunitaria. “Nos encontramos establecimientos absolutamente respetables que utilizan el prefijo farmacia o la cruz y, ante esta situación, desde la empresarial consideramos que la intención es confundir a los usuarios y aprovecharse de la credibilidad de las farmacias”, explica a ConSalud.es Antoni Torres, presidente de Fefac.
Torres: "La intención es confundir a los usuarios y aprovecharse de la credibilidad de las farmacias”
Con respecto a la normativa catalana, Torres recuerda que la ley de ordenación farmacéutica no tiene una reserva de ley y para una modificación siguiendo el modelo canario se debería hacer mediante otra orden. “Por tanto, no hay una obligación de hacerlo pero está claro que la competencia es de la Generalitat”, destaca y añade: “Se trata de proteger al consumidor porque no se puede usar una simbología que no corresponde, entiendo que la legislación antes no lo regulaba porque no había necesidad, pero ahora se ha dado este problema”.
En este sentido, el presidente de la patronal farmacéutica catalana subraya el carácter alegal de la situación. “Cuando denunciamos el caso ante el departamento de Salud nos dicen que no se puede tramitar porque no se trata de un establecimiento sanitario que es una cuestión que corresponde a Consumo y, una vez allí, nos comunican que Consumo no se encarga de la regulación del contenido”.
UN POSIBLE AVANCE
Por otra parte, hace unas dos semanas representantes de Fefac mantuvieron una reunión con Adrià Comella, el nuevo director del CatSalud, para trabajar en una propuesta para mejorar la colaboración y la participación de las farmacias con el Servicio Catalán de Salud.
Entre otros temas, el uso de la simbología de las farmacias y el cambio de normativa se trasladaron a la Administración catalana, la cual se comprometió a estudiar y continuar en conversaciones para la búsqueda de soluciones.