El martes 4 de junio están llamados los primeros estudiantes para realizar la evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). De este examen saldrán los alumnos que el próximo curso llenarán las aulas de las facultades de Medicina.
Medicina es uno de los grados actuales con las mayores notas de corte. Un claro ejemplo de ello es la Universidad Autónoma de Madrid, que el año pasado con un 13,124 fue el centro con la calificación más alta. Las altas puntuaciones que se requieren no se deben solo a la dificultad del grado, sino también a que cada vez hay son más las universidades que ofrecen esta titulación y el incremento de la oferta trae un incremento de la nota.
Su parte práctica o tradición familiar son algunos de los motivos más atractivos para la elección de Medicina
Conseguir hacerse con una de las ansiadas plazas conlleva muchas horas de estudio. Un sacrificio que no cesa una vez se alcanza la universidad. Para aquellos jóvenes que se decantan por otros grados les puede surgir la pregunta, ¿realmente merece la pena?
Estudiar Medicina merece la pena por muchos aspectos, la vocación es siempre el primero de ellos. Una de las frases más repetidas el día que las universidades publican las listas de admitidos es “mi sueño hecho realidad”. Y es que los futuros médicos llevan imaginándose con la bata blanca desde pequeños.
La carga práctica es otro de los grandes atractivos de estos estudios. Los futuros médicos pasan gran cantidad de horas en el hospital. Incluso en alguna universidad llegan a tener cursos enteros en los hospitales y centros de salud.
La tradición familiar suele tener también mucho peso a la hora de decantarse por estos estudios. Son muchos los alumnos que proceden de una saga de médicos y la elección del grado está clara desde niños.