Este tipo de técnicas, de gran complejidad y que precisan de un entrenamiento endoscópico avanzado por parte de los profesionales que lo realizan, solo se lleva a cabo en los hospitales con los servicios de Aparato Digestivo y Endoscopia más desarrollados del país. Por lo que, supone un salto cualitativo para la provincia en el tratamiento de los tumores localizados en la parte alta del intestino.
Los resultados de los estudios publicados hasta ahora confirman que la resección o extirpación endoscópica tiene los mismos resultados en cuanto a curación de la enfermedad que la opción quirúrgica tradicional. Aunque presentan una disminución significativa de la mortalidad y la morbilidad asociada a la cirugía, gracias a su elevado porcentaje de éxito y el bajo índice de complicaciones que presenta. Puesto que evita tener que extraer parte del páncreas y del duodeno para la eliminación del tumor.
El Hospital Juan Ramón Jiménez es nuestro Centro de Referencia de hoy.