Coherus BioSciences volverá a reducir su plantilla tras la reciente venta de su biosimilar de Neulasta, Udenyca, a Accord BioPharma. Como parte del acuerdo, se espera que aproximadamente 50 empleados asociados al medicamento se transfieran a Accord, lo que supondrá una reducción del 30% en la plantilla de Coherus, según detalló la empresa en sus resultados financieros anuales.
Udenyca, aprobado en 2018 como biosimilar de Neulasta (Amgen), se utiliza en pacientes con cáncer sometidos a quimioterapia mielosupresora para aumentar su recuento de glóbulos blancos y reducir el riesgo de infecciones. La venta del fármaco a Accord BioPharma forma parte de la estrategia de reestructuración de Coherus, que en diciembre de 2023 anunció un acuerdo con Intas Pharmaceuticals, la empresa matriz de Accord, por un pago inicial de 483,4 millones de dólares (443,55 millones de euros), más otros 75 millones (68,82 millones de euros) adicionales vinculados a hitos de ventas netas.
"Proyectamos una posición de caja de aproximadamente 250 millones de dólares
“Tras la finalización de la desinversión de Udenyca y el pago de nuestras importantes obligaciones de deuda y regalías, proyectamos una posición de caja de aproximadamente 250 millones de dólares (229,39 millones de euros)”, explica Denny Lanfear, director ejecutivo de Coherus. “Se espera que estos esfuerzos, combinados con la optimización organizativa, proporcionen a Coherus una liquidez de más de dos años, financiando el proceso de desarrollo mediante catalizadores de datos clave en 2025 y 2026”.
Después de esta reestructuración, Coherus contará con aproximadamente 155 empleados, lo que refleja su segundo recorte significativo en dos años. En 2023, la empresa ya había implementado una reducción del 30% en su plantilla, con el despido de 60 trabajadores.
El objetivo de Coherus ahora se centra en el desarrollo de su cartera de productos en fase clínica, que incluye casdozokitug, un antagonista de IL-27 en fase 2 para carcinoma hepatocelular, y CHS-114, un anticuerpo dirigido a CCR8.
Además, la empresa busca maximizar el potencial de ingresos de Loqtorzi, el primer inhibidor de PD-1 fabricado en China que ha obtenido la aprobación en Estados Unidos. Este fármaco es una de las principales apuestas comerciales de Coherus tras la venta de Udenyca, en un esfuerzo por redefinir su estrategia en oncología e inmunoterapia.