La inflamación del hígado y el cerebro podrían estar relacionadas: una investigadora analiza por qué

El hígado, que experimenta inflamación crónica con los años, se comunica con el cerebro, desencadenando una inflamación que puede provocar un deterioro cognitivo a largo plazo

La inflamación del hígado y el cerebro podrían estar relacionadas (Foto. Canva)
La inflamación del hígado y el cerebro podrían estar relacionadas (Foto. Canva)
Carmen Bonilla
1 diciembre 2024 | 12:00 h
Archivado en:

El hígado se encuentra entre varios órganos que, a medida que las personas envejecen, experimentan una inflamación crónica de bajo grado. Este estado, aunque no haya ninguna amenaza, mantiene el sistema inmunológico activado. La inflamación del hígado se ha relacionado con varias enfermedades hepáticas, como puede ser la enfermedad del hígado graso y el cáncer de hígado.

Sin embargo, el hígado se comunica también con el cerebro, lo que desencadena una inflamación que puede provocar un deterioro cognitivo. Pero, ¿a qué se debe esta comunicación entre ambos órganos? La investigadora de la Universidad de Oklahoma, Deepa Sathyaseelan, investiga las respuestas.

"Nuestra hipótesis es que cuando se activa la necroptosis hepática, el hígado secreta moléculas tóxicas o inflamatorias que entran en el torrente sanguíneo"

En concreto, estudia la necroptosis, una forma natural de muerte celular en la que las células estallan y liberan sustancias que provocan la inflamación. En investigaciones anteriores, la experta demostró los efectos de la necroptosis en el hígado, y descubrió que su activación aumenta la inflamación hepática. Esto, además, aumentaba la inflamación cerebral.

“Nuestra hipótesis es que cuando se activa la necroptosishepática, el hígado secreta moléculas tóxicas o inflamatorias que entran en el torrente sanguíneo y cruzan la barrera hematoencefálica, donde provocan inflamación en el cerebro”, afirmó. “Este tipo de comunicación entre órganos está adquiriendo gran importancia en la investigación. Por lo general, cuando estudiamos una enfermedad, nos centramos en un órgano, pero cuando lo hacemos, pasamos por alto el efecto sistémico”.

El estudio indica que, en el caso del deterioro cognitivo asociado a la edad o a la enfermedad de Alzheimer, no se debería pensar solo en atacar al cerebro. En este contexto, Sathyaseelan investigará varios factores adicionales relacionados con la inflamación en su estudio. Por ejemplo, los macrófagos son células inmunes que funcionan de manera positiva durante infecciones o lesiones al “comerse” las células muertas, lo que aumenta la capacidad del cuerpo para sanar. 

Pese a ello, cuando la inflamación crónica pone al cuerpo en un estado de alerta constante, el comportamiento de estos macrófagos se vuelve extraño y contribuye aún más a la inflamación. Por otro lado, la investigadora se centrará también en el papel de la senescencia celular en la inflamación del hígado. Las células senescentes no se replican, pero tampoco mueren, y aumentan la inflamación. Sathyaseelan estudiará el papel de la necroptosis tanto en los macrófagos como en la senescencia celular y tratará de reducir la inflamación utilizando compuestos que se sabe que inhiben la necroptosis.

Los hallazgos de la investigadora podrían tener numerosas implicaciones, tanto para la enfermedad hepática como para el deterioro cognitivo en el proceso de envejecimiento

Los hallazgos de la investigadora podrían tener numerosas implicaciones, tanto para la enfermedad hepática como para el deterioro cognitivo en el proceso de envejecimiento. Esto podría ser un gran hito, ya que son pocos los tratamientos disponibles, tanto para patologías como la enfermedad del hígado graso como para otras como el cáncer de hígado.

Por otro lado, cuanto más persista el aumento de la inflamación en el cerebro, mayor será la probabilidad de que el deterioro cognitivo leve se convierta en una disfunción cognitiva grave. “Lo que hemos descubierto hasta ahora en nuestros estudios con ratones coincide con lo que se ha informado sobre los pacientes: las personas con enfermedades hepáticas tienen una inflamación elevada en el hígado y también tienen problemas cognitivos”, dijo Sathyaseelan. “Nuestra pregunta clave es ¿qué está causando este aumento de la inflamación en el envejecimiento? Es importante que avancemos en nuestro conocimiento en esta área porque es fundamental que desarrollemos nuevas formas de tratar estas enfermedades

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
Lo más leído