Un equipo internacional de científicos, encabezado por Mercedes Conde-Valverde, investigadora de la Cátedra de Otoacústica Evolutiva y Paleoantropología de HM Hospitales y la Universidad de Alcalá, acaba de publicar en Journal of Human Evolution, un novedoso estudio sobre el Cráneo 4 del yacimiento de la Sima de los Huesos, en Atapuerca , de 430.000 años de antigüedad.
El Cráneo 4, actualmente expuesto en el Museo de la Evolución Humana de Burgos, es mundialmente conocido como el caso más antiguo de sordera en la evolución humana, estudiado por primera vez en 1997.
El Cráneo 4 presentaba un caso de exostosis que bloqueaba los conductos auditivos
Los conductos auditivos de este individuo muestran la presencia de recrecimientos óseos patológicos, llamados exostosis, que los bloquean parcialmente. Se han documentado casos similares en neandertales de toda Europa y Oriente Medio y en otros esqueletos de periodos más recientes. Aunque su causa no está clara, a menudo se ha asociado con las exposición repetida al agua fría.
En las últimas décadas, se ha producido un gran avance en las técnicas de tomografía computarizada, que permiten crear modelos tridimensionales de la estructura del oído. Asimismo, los investigadores de Atapuerca han desarrollado una metodología novedosa que permite establecer las capacidades auditivas de un ejemplar a partir de las medidas de los modelos tridimensionales y la inclusión de las mismas en un modelo biofísico.
Esta metodología, aplicada anteriormente a otros ejemplares sanos, se ha aplicado en esta ocasión al Cráneo 4 para determinar con exactitud el alcance de su sordera, ya que la exostosis no siempre implica la aparición de sorderas graves.
Los resultados indicaron que la exostosis no afectó a la audición del individuo
Las exostosis son unas de las patologías más estudiadas en casos prehistóricos, sin embargo, “nuestro estudio es el primer intento detallado de analizar las implicaciones clínicas de esta patología en nuestros ancestros humanos fósiles”, explica Conde-Valverde. “Nuestros resultados sugieren precaución al atribuir consecuencias auditivas a la presencia de estos crecimientos óseos si no se realizan estudios tan detallados y exhaustivos como el realizado con el Cráneo 4”, asegura.
Por su parte, la jefa del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario Principe de Asturias, Teresa Rivera, señala que "desde el punto de vista de un especialista en Otorrinolaringología no era evidente que la exostosis del Cráneo 4 le hubiera producido una sordera total al individuo y nos pareció buena idea aplicar a este caso las nuevas metodologías para determinar con precisión el alcance de la pretendida sordera en el ejemplar”.
Sin embargo, los resultados obtenidos fueron completamente inesperados, pues indican que la patología de los conductos auditivos no fue tan grave como para afectar a la audición del individuo y que, en consecuencia, no era sordo. "Nos sorprendieron mucho los resultados", dice el Catedrático de ingeniería de las telecomunicaciones de la Universidad de Alcalá Manuel Rosa, "Esperábamos que este individuo hubiera sufrido algún grado de pérdida auditiva y, sin embargo, nuestros resultados muestran inequívocamente que oía tan bien como el resto de individuos sanos de la Sima de los Huesos. No estaba sordo en absoluto".