Para la elaboración de un estudio estadounidense, se pidió a un grupo de médicos que clasificasen los riesgos percibidos en 161 pacientes que padecían insuficiencia cardíaca. Asimismo, a los pacientes también se les pidió que clasificasen los riesgos que creían que podían padecer.
Los médicos señalaron que el 69% de los pacientes eran propensos a morir o a necesitar un trasplante en el próximo año. Sin embargo, tan solo el 14% restante de los pacientes creían que podían sufrir estas consecuencias, según afirman los investigadores en la publicación Journal of the American College of Cardiology (JACC).
Los médicos pensaron que el 69% de los pacientes eran propensos a morir o a necesitar un trasplante
Por otra parte, los investigadores también evaluaron si los pacientes estaban dispuestos a considerar otras terapias para tratar la insuficiencia cardíaca avanzada. De esta manera, el 77% de los pacientes considerados de alto riesgo por los médicos afirmaron que considerarían recibir un dispositivo de asistencia ventriculal. Mientras que un 66% no consideraba aplicar otras terapias.Por último, destaca el hecho de que el 21% de los pacientes muriese durante el período de realización del estudio, un 8% fuera sometido a trasplantes y 9% recibiese dispositivos de asistencia ventricular.