El Laboratorio Central de Veterinaria (LCV) de Algete ha confirmado nuevos casos de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) en varias comunidades autónomas. El centro nacional de referencia para esta enfermedad ha detectado nueve focos, todos en explotaciones de bovino en La Coruña, Cantabria, Asturias, Huesca, Toledo, Zamora y Madrid.
Mientras la enfermedad avanza por la península, los ganaderos se muestran incesantes y solicitan al Gobierno central los paquetes de ayudas para cubrir las pérdidas generadas en el último año por la enfermedad. Algunas comunidades han tomado medida para establecer el control en su territorio y ayudar al sector ganadero a paliar los efectos de la enfermedad.
El MAPA en un comunicado ha informado sobre la situación epidemiológica actual. El Ministerio ha explicado que, con el fin de recopilar información sobre la situación, los casos se están identificando en el LCV de Algete y en los laboratorios regionales para identificar los focos en cada comarca.
Los animales presentan mayor afectación clínica si tienen más de 24 meses, son machos de razas no rústicas y se encuentran en sistema de producción extensivo
En esta labor es fundamental el papel de los Servicios Veterinarios Oficiales que trabajan mediante un seguimiento del resto de comunicaciones de sospechas clínicas en explotaciones y cotos, así como la monitorización de determinadas explotaciones. El objetivo es controlar el impacto real de la enfermedad en el campo.
Según los últimos datos actualizados, los animales presentan mayor afectación clínica si tienen más de 24 meses, son machos de razas no rústicas y se encuentran en sistema de producción extensivo.
Se restringe el movimiento para vida, no para sacrificio, siempre y cuando se desplacen siguiendo las normas de seguridad establecidas
Asimismo, las limitaciones en el movimiento del ganado se mantienen hacia otros Estados miembros para animales bovinos, ovinos y caprinos. Se restringe el movimiento para vida, no para sacrificio, siempre y cuando se desplacen siguiendo las normas de seguridad establecidas.
El MAPA recuerda que la EHE no es una enfermedad que afecte al ser humano, por lo que no existen restricciones en cuanto al movimiento o consumo de productos de estos animales, ya sea leche, carne, piel, etcétera.
En cuanto a los movimientos nacionales, los animales y vehículos deben estar desinsectados para garantizar la seguridad de los movimientos de las zonas afectadas a las zonas libres.
El Ministerio recuerda la importancia de comunicar a los servicios veterinarios cualquier sospecha en las especies susceptibles, domésticas y silvestres para valorar el impacto de la enfermedad y su distribución, teniendo en cuenta las medidas de desinsectación en animales e instalaciones como sistema de lucha contra el vector.