La saliva es un líquido vital y a menudo subestimado en nuestro cuerpo. Desempeña un papel fundamental en la limpieza bucal, la digestión y la protección de nuestros dientes y encías. Sin embargo, muchas personas desconocen la importancia de la saliva hasta que experimentan el síndrome de boca seca.
La saliva se produce en las glándulas salivales y está compuesta por agua, enzimas, electrolitos y otros compuestos beneficiosos. Tiene varias funciones esenciales en la boca, y una de las más importantes es la lubricación. La saliva humedece la boca y facilita la masticación y la deglución de los alimentos. También ayuda a mantener la mucosa oral hidratada, evitando la sequedad y la incomodidad.
EL PAPEL FUNDAMENTAL DE LA SALIVA EN LA LIMPIEZA BUCAL
La saliva actúa como un agente de enjuague natural, ayudando a eliminar los restos de alimentos y las bacterias de la boca. La saliva contiene enzimas, como la amilasa, que inician el proceso de digestión de los carbohidratos presentes en los alimentos. Además, contiene anticuerpos y proteínas que combaten las infecciones y ayudan a prevenir enfermedades dentales.
Cuando la producción de saliva disminuye y la boca se vuelve más seca, se puede desarrollar el síndrome de boca seca, también conocido como xerostomía. Esta afección puede ser causada por varios factores, como medicamentos, radioterapia, enfermedades autoinmunes o simplemente el envejecimiento. El síndrome de boca seca no solo causa molestias y dificultad para hablar y comer, sino que también puede tener efectos negativos en la salud oral.
Sin una cantidad adecuada de saliva, la boca se vuelve más vulnerable a las enfermedades dentales. La saliva actúa como una barrera protectora contra las bacterias y los ácidos que causan las caries. Sin suficiente saliva, el riesgo de caries aumenta significativamente. Además, la sequedad bucal puede contribuir a la irritación de las encías, el mal aliento y la formación de llagas en la boca.
El uso de la saliva como herramienta de diagnóstico ha ganado una considerable atención y se ha convertido en un método bien aceptado
El análisis de los componentes de la sangre es la base del diagnóstico de laboratorio. Sin embargo, en la última década ha aumentado el interés por los test de diagnóstico rápido y menos invasivos lo que ha llevado a investigar la saliva como fluido biológico para el diagnóstico clínico.
Es importante resaltar que, a diferencia de la sangre, el empleo de la saliva como fluido diagnóstico presenta un riesgo mínimode contaminación del personal sanitario con microorganismos de transmisión parenteral, como son los virus de la hepatitis B y C y el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
El interés de la saliva como fluido diagnóstico radica en que, al igual que otros, posee marcadores biológicos o biomarcadores que ofrecen información sobre el estado de salud y enfermedad en el hospedador.