En este sentido, la Clínica Tufet de Barcelona propone sus tratamientos especialmente dirigidos a los pies para prepararlos para el destape y que luzcan bonitos.
La aparición de hongos, las verrugas plantares o callosidades, la deformidad en los dedos de los pies y las uñas encarnadas son las afecciones que más preocupan con la llegada del verano
1. HONGOS EN LAS UÑAS
La onicomicosis es una de las afecciones ungulares más frecuentes, que llega a afectar hasta a un 11% de la población europea. Entre los factores que predisponen a sufrirla están la hiperhidrosis, el uso de calzado muy cerrado, traumatismos de repetición, diabetes, síndromes de inmunodeficiencia e insuficiencia vascular periférica. En la Clínica Tufet, tras un examen clínico y un análisis micológico diagnostican el tratamiento de curación más adecuado: técnicas mixtas de avulsión y anti-fúngicos locales, anti-fúngicos orales, o láser Nd-Yag.
2. CALLOSIDADES EN LA PLANTA
Se trata de la hipertrofia de la piel del pie. La mayoría se producen por un problema de sobrecarga mecánica del pie y pueden llegar a ser muy molestas al producir un severo dolor al caminar por el roce con el calzado. Para ello, esta clínica realiza tratamientos para adelgazar las callosidades, recomienda plantillas a medida; y en los casos más severos, propone el tratamiento quirúrgico mediante la realización de osteotomías o cortes en el hueso.
3. DEFORMIDAD EN LOS DEDOS
En muchas ocasiones la deformidad es solo un problema estético, pero en otras esta deformidad genera un severo dolor e incluso la incapacidad de calzarse. En los casos que la deformidad de los dedos de los pies sea importante y dolorosa, como en el caso de los juanetes, o que no mejore con siliconas correctoras, se recomienda el tratamiento quirúrgico. La cirugía específica de los dedos del pie ofrece una buen corrección consiguiendo unos dedos rectos y sin dolor.
4. UÑAS ENCARNADAS
La uña encarnada se produce por una inflamación y posible infección de la región periungucal. El principal tratamiento es realizar un corte exacto, que ha de ser realizado por el podólogo. En el caso de presentar dolor en la zona, se recomienda el lavado con agua caliente, y añadir clorina para desinfectar. Es básico mantener el piel del dedo bien seco y también se recomienda utilizar cremas antisépticas. Eso sí, si se diagnostica una infección en la zona, se recomienda el uso de cremas con antibiótico para controlar la infección.
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