Las recetas de fármacos para el dolor nervioso como Neurontin y Lyrica se han triplicado en los últimos años debido a un mayor uso entre los adultos con enfermedades crónicas y pacientes que ya toman opioides.
Así se desprende de un estudio realizado en Estados Unidos, que muestra que la proporción de adultos estadounidenses que tomaron Neurontin (que incluye gabapentina) y otros fármacos de la misma familia de medicinas ha aumentado del 1,2% en 2002 al 3,9% en 2015, un período que también experimentó un aumento en las sobredosis y muertes por opiáceos.
"Casi uno de cada 25 adultos toma un gabapentinoide durante un año, lo que importa porque tenemos pocos datos para respaldar el uso de esta clase de medicamentos y datos mínimos para respaldar la seguridad a largo plazo de los medicamentos", ha explicado el autor del estudio Michael Johansen, de la Heritage College of Osteopathic Medicine en la Universidad de Ohio en Atenas.
El crecimiento de las recetas se concentró entre los adultos mayores, los diabéticos, las personas con problemas de salud crónicos y los pacientes que ya tomaban opiáceos
En este mismo sentido, según ha informado la agencia de noticias Reuters, Johansen ha declarado que tiene la sospecha de que gran parte del uso se debe a intentar tratar el dolor crónico con un medicamento no opioide.
Así, en medio de la epidemia de opiáceos, el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) ha instado a los médicos a recetar otros medicamentos para el dolor, incluyendo acetaminofeno y medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, así como gabapentinoides.
Para el estudio, Johansen ha revisado los datosde una muestra de 346.177 adultos, incluidos los detalles sobre cualquier condición médica y prescripción.
En definitiva, el crecimiento de las recetas se concentró entre los adultos mayores, los diabéticos, las personas con problemas de salud crónicos y los pacientes que ya tomaban opiáceos o benzodiazepinas como Valium y Xanax.