Sostenibilidad colaborativa, la forma de reducir las emisiones de alcance 3 del sector farmacéutico

A través de la colaboración las compañías esperan fortalecer los vínculos con los proveedores y los clientes, para estandarizar planes de reducción de emisiones, e identificar oportunidades de eficiencia y sostenibilidad

Experimento de biotecnologia  (Foto. Freepik)
Experimento de biotecnologia (Foto. Freepik)
José Iborra
25 enero 2024 | 00:00 h
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La sostenibilidad colaborativa en la industria farmacéutica es un enfoque que busca integrar los principios de ambientales, sociales y económicos en todas las etapas de la cadena de valor de los medicamentos. Esto implica ser sostenible en todos los procesos, desde el I+D hasta la fabricación, la distribución, el uso y la disposición final de los productos.

Este enfoque implica la cooperación entre los diferentes actores de la industria, como los laboratorios, los proveedores, los reguladores, los profesionales sanitarios, los pacientes y la sociedad en general, para lograr objetivos comunes de salud, innovación y responsabilidad.

En la actualidad, el sector farmacéutico produce un 55% más de emisiones que la industria automotriz. Una de las cuestiones más problemáticas son las emisiones de alcance 3 y la descarbonización general de la cadena de suministro, que se producen a lo largo de toda la cadena y que cuantificar es todo un desafío a partir de terceros actores indirectos. Sin embargo, se estima que estas emisiones indirectas a lo largo de la cadena de suministro representan el 95% de las emisiones promedio de una empresa.

Se estima que estas emisiones indirectas a lo largo de la cadena de suministro representan el 95% de las emisiones de una empresa

Dado que las empresas no son capaces de controlar directamente estas emisiones, a pesar de ser responsables de la mayor parte del impacto, se vuelve imperante la colaboración entre los actores de la industria para establecer métodos de acción. A través de la sostenibilidad colaborativa esperan fortalecer los vínculos con los proveedores y los clientes, para estandarizar planes de reducción de emisiones, identificar oportunidades de eficiencia y sostenibilidad, y mejorar el desempeño ambiental de toda la cadena de valor.

No es razonable suponer que una empresa por sí sola pueda alcanzar objetivos ambiciosos de descarbonización. Las asociaciones no solo pueden ayudar a establecer objetivos más realistas y transparentes, sino que también equilibran los esfuerzos. Pese a que se espera que durante este 2024, se comience a trabajar en esta necesidad, como bien indica el informe de CPHI “2024 Pharma Industry Trends Outlook”, este no es un trabajo de un año, llevará tiempo y es necesario avanzar con constancia y perseverancia.

La extracción, la fabricación y el uso de medicamentos son los componentes más importantes de las emisiones de alcance 3. Coordinando esfuerzos, se abordaría cómo reducir el impacto ambiental de la producción y el consumo de medicamentos, mediante la optimización de los recursos, la minimización de los residuos, la prevención de la contaminación y la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Las empresas farmacéuticas, al darse cuenta de la urgencia de la gestión ambiental, están publicando sus compromisos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en sus informes ESG. Como parte de una iniciativa internacional que intenta lograr esta gestión, la OMS lanzó su Marco Operativo para Sistemas de Salud Sostenibles en el período previo a la COP28. Cada año, más y más países asumen sus compromisos y, con un modelo a seguir, esto brindará mayor claridad a partir del 2024, ya que no se alcanzará en el corto plazo sino como un objetivo a largo plazo.

Todavía hay mucho que experimentar en el contexto de una sociedad sostenible

Como industria llena de científicos, todavía hay mucho que experimentar en el contexto de una sociedad sostenible, abordando verdaderamente las desigualdades en salud. En el último informe de CPHI, se enmarca el papel clave a la hora de demostrar cómo fabricar de forma sostenible, no solo en términos de carbono, sino también en términos de uso de la tierra, uso del agua y abastecimiento de materiales.

La sostenibilidad colaborativa en la industria farmacéutica tiene múltiples beneficios, como la mejora la salud pública y el acceso a los medicamentos, mediante el desarrollo de soluciones innovadoras. Sin embargo, aunque en teoría muchas empresas afirman que han dado el paso hacia una visión más sostenible, según el CPHI la mayoría de la industria aún no ha desarrollado planes claros para reducir las emisiones de carbono, un punto de partida en términos de la transición hacia una industria más sostenible.

La sostenibilidad colaborativa en la industria farmacéutica es un reto y una oportunidad para el sector, que requiere de un cambio de mentalidad, una visión estratégica, una cultura de aprendizaje y una voluntad de acción.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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