El nuevo Real Decretosobre uso de drones, que entró en vigor el 30 de diciembre de 2017, permite a los profesionales poder sobrevolar poblaciones, personas, en espacio aéreo controlado y de noche, toda vez que presenten un estudio de seguridad y posean una autorización previa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
Hasta el momento, el uso de estas aeronaves ha permitido en España el control de incendios forestales, el rescate de personas, la manipulación de materiales nocivos o la investigación biológica. Ahora y gracias a la aprobación de la reciente normativa, el sector salud puede ampliar sus posibilidades en un futuro cercano, siempre y cuando los drones no sobrepasen los 120 metros de altura ni un peso superior a 10 kilogramos.
La normativa estipula que los drones no deben sobrepasar los 120 metros de altura ni cargar un peso superior a los 10 kilogramos
La realidad es que son muchos los países, algunos pertenecientes a la Unión Europea (UE), en los que la aplicación de estas tecnologías comienza a ser factible en diferentes formatos y con distintos fines que tienen una meta común: mejorar la salud de la población.
TRASLADO DE MUESTRAS
La capacidad que tienen los drones de llegar a los rincones más insospechados los convierten en un dispositivo indicado para transportar, por ejemplo, muestras de sangre. De esta forma, se introduce un atajo en el proceso entre las clínicas y los bancos de sangre, acortando el periodo de tiempo que tardan en la distribución.
Una nueva técnica, que ya ha sido probada con éxito en la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos), ha determinado que estas muestras de sangre no se veían alteradas durante el viaje. Por lo tanto, el equipo de investigación concluyó que las zonas menos desarrolladas o de difícil acceso podrían contar con resultados de análisis y otras pruebas médicas a la mayor brevedad; incluso, las muestras extraídas en un accidente podrían trasladarse rápidamente para favorecer la rapidez de atención a los heridos.
SUMINISTRO DE MEDICAMENTOS
Aunque Alemania ya había hecho alguna prueba experimental, no fue hasta verano de 2015, con la colaboración de la NASA, cuando se pudo realizar satisfactoriamente el primer envío de medicamentos en Estados Unidos de la mano de un dron.
Un dron ha conseguido transportar 24 paquetes de fármacos en 90 minutos a una zona rural de difícil acceso en Virginia (Estados Unidos)
La aeronave consiguió transportar 24 paquetes de fármacos en solo 90 minutos a una zona rural de Virginia. Un lugar de difícil acceso, donde por norma general, sus habitantes tienen que esperar un par de días para recibir sus prescripciones médicas.
En este contexto, la Singularity University ha sido la cuna de Matternet, una idea que consiste en una red de drones que viajaría de forma autónoma a zonas de guerra o a lugares afectados por desastres naturales. En este caso, el proyecto conseguiría transportar ayuda humanitaria, suministros médicos, fármacos o herramientas diagnósticas.
EMERGENCIAS: TRANSPORTE DE BOTIQUINES
Por otra parte, en las situaciones de urgencia, lo que prima es la rapidez de actuación. Por este motivo, son muchos los proyectos que se están llevando a cabo en distintos países con el objetivo de salvar vidas.
En este sentido, la aplicación de la tecnología de drones tiene la finalidad de llevar al lugar de la emergencia material médico de diagnóstico y el correspondiente botiquín. Hasta el momento, se trata de un pequeño dron con una capacidad de 2 kilos de mercancía. En la mayoría de los casos, el material consiste en desfibriladores para tratar y diagnosticar paradas cardiorrespiratorias.