La actividad física ligera, como realizar trabajos de jardinería, pasear por un parque y doblar la ropa podría ser suficiente para reducir significativamente el riesgo de enfermedad cardiovascular entre las mujeres mayores de 63 años, según un estudio financiado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre. Este tipo de actividad parece reducir el riesgo de eventos de enfermedades cardiovasculares como accidentes cerebrovasculares o insuficiencia cardiaca hasta en un 22%, y el riesgo de ataque cardiaco o muerte coronaria, hasta en un 42%. En el estudio prospectivo de cinco años, los investigadores siguieron a más de 5.800 mujeres de entre 63 y 97 años.