Consumir grandes dosis de suplementos con extractos de té verde podría estar ligado a una serie de dolencias en el hígado. Así lo pone de manifiesto una reciente investigación de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés European Food Safety Authority), una institución que revela que la mayoría de suplementos aporta una ingesta de 5-1000 mg, mientras que las infusiones de té apenas suelen contener 90-300 mg.