Miguel Rodríguez inauguró el pasado 3 de octubre este evento, que reúne en Santander a más de 400 profesionales sanitarios con el objetivo de mejorar la comunicación con los pacientes. En una de sus intervenciones animó a los profesionales sanitarios a ampliar su formación en comunicación, tanto oral como gestual "para comunicar bien y de forma adecuada, que es una de nuestras asignaturas pendientes".
No todo depende de la forma en que los sanitarios de dirigen a los pacientes
La comunicación es la base de las relaciones sociales, y un mensaje adecuado puede mejorar los diagnósticos clínicos, reforzar el trabajo en equipo y "ayudar a prevenir las agresiones, una de las grandes lacras que tienen que soportar los profesionales sanitarios", sentenció Rodríguez. “Estoy convencido de que modificar nuestras pautas comunicativas y aprender a modular el tono, a reflejar empatía y a hacer ver al paciente que lo que estás transmitiendo lo haces de forma sentida, podría ayudar a reducir de forma drástica las situaciones violentas y las agresiones".
Pero no todo depende de la forma en que los sanitarios se dirijan a los pacientes. Rodríguez ha subrayado también la importancia de saber escuchar, esencial para detectar casos de violencia de género, violencia infantil o contra las personas mayores. "Quien lo sufre no os va a decir nada, pero puede que, con el tono de voz o la simple gestualidad, esté pidiendo ayuda", ha explicado.
El programa consta de un total de 40 sesiones, entre talleres formativos, conferencias y mesas redondas. Otros temas que se han abordado son las decisiones compartidas, las conversaciones difíciles o la entrevista motivacional, además de la comunicación con pacientes con necesidades específicas.