La falta de médicos rurales se ceba con Cataluña

La Medicina Rural no es una opción para los facultativos catalanes, los profesionales que quieran irse a trabajar a zonas dispersas escasean.

Alba Vergés, consejera de Salud de Cataluña, y el presidente de la Generalitat, Quim Torra.
Alba Vergés, consejera de Salud de Cataluña, y el presidente de la Generalitat, Quim Torra.
CS
13 marzo 2019 | 00:00 h

Hace casi una década, la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (Camfic) aseguraba en un estudio, que los médicos de Familia que trabajan en zonas rurales tienen mayor reconocimiento social y sufren menos estrés que los que trabajan en las ciudades. Sin embargo, el escaso atractivo de estas plazas está generando dificultades en las consejerías autonómicas de Sanidad y Salud para cubrir las vacantes que surgen en estas poblaciones.

Es una asignatura pendiente, aunque algunas CC.AA. han tomado ya la delantera, como es el caso de Castilla y León, en donde pagarán un complemento a aquellos médicos que se decidan por realizar su trabajo en zonas de difícil cobertura. De hecho, la falta de incentivos para trabajar en estas poblaciones es una preocupación también para el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.

Castilla y León lidera la iniciativa por parte de las CC.AA. otorgando incentivos económicos a los médicos que se decidan a trabajar en estas zonas de difícil cobertura

Cataluña es una de esas autonomías en donde los profesionales que quieran irse a trabajar a zonas dispersas escasean. La Medicina Rural no es una opción para los facultativos catalanes, la precariedad laboral y la falta de incentivos tampoco contribuyen a que lo sea.

UNANIMIDAD ENTRE LOS COLECTIVOS MÉDICOS

Según la información publicada por El País, en 2018, el servicio de ocupación del Colegio de Médicos de Barcelona (COMB) gestionó 1.357 ofertas de trabajo. Tres de cada cuatro correspondían a plazas disponibles en el área de Barcelona y el resto de ofertas eran de otras comarcas de Cataluña, que solo se cubrieron con un candidato el 40% de ellas. 

En declaraciones al diario que edita el Grupo Prisa, el presidente del Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña, Josep Vilaplana, reconoce que también faltan médicos en Girona. “Médicos de familia faltan uno, dos, tres en todos los centros de atención primaria de la provincia. También en urgencias del hospital de Palamós, Figueres, Santa Caterina... En el hospital de Olot se paga relativamente bien. Y a pesar de pagar, no encuentras”, explica.

"El papel de la Administración es crucial; si no se ocupa de esto, estamos muertos”

 

El sindicato Metges de Catalunya se suma a las revindicaciones del CCMC.“Hay que dar incentivos económicos. También mantener cierta profesionalidad en las actuaciones, como darle un mes al año para ir a los servicios de Medicina Interna de los grandes hospitales. Y, a nivel laboral, que se compense también con más nota para hacer concurso de traslado. El papel de la Administración es crucial; si no se ocupa de esto, estamos muertos”, sostiene Josep Maria Puig, secretario general de la organización sindical.

Lo que ocurre en Cataluña es solo un retrato parcial del escenario complicado al que se enfrentan los gobiernos autonómicos a la hora de encontrar profesionales sanitarios que quieran optar a ejercer en los pueblos (más rurales) de España.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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