Sagardui ultima una legislatura sanitaria vasca con AP en el foco y nueva Ley de Sanidad Pública

El Pais Vasco celebrará este 2024 unas nuevas elecciones autonómicas que marcarán el final de la estapa de Iñigo Urkullu como lehendakari y traerá cambios a Osakidetza

La consejera de Salud del Gobierno Vasco, Gotzone Sagardui (Foto: IREKIA/EuropaPress)
11 enero 2024 | 00:00 h

La llegada de 2024 supone la recta final de la legislatura en el País Vasco, donde se ultima la fecha para unas nuevas elecciones autonómicas. Estos comicios supondrán el final del largo periplo de 12 años y tres legislaturas de Iñigo Urkullu (PNV) como lehendakari, quien no repetirá en el cargo. Lo que todavía no se ha concretado es la fecha en la que los ciudadanos serán llamados a las urnas, aunque extraoficialmente se viene apuntando el mes de marzo. De esta manera, este 2024 dará también luz verde a la posibilidad de un cambio en la Consejería de Salud, dirigida por la médico Gotzone Sagardui desde 2020.

En plena pandemia de Covid-19, Sagardui tomó las riendas del departamento de Salud vasco en sustitución de Nekane Murga. Tuvo que afrontar la lucha contra la inesperada crisis sanitaria y sus consecuencias negativas en Osakidetza, que llevaron a estresar el primer nivel asistencial hasta puntos nunca antes vistos. No en vano, Euskadi se convirtió en una de las CC.AA. con más incidencia de muertes, tras Castilla y León y Castilla-La Mancha. Tiempo después, desarrolló la estrategia de vacunación para poner freno a la expansión del coronavirus y se puso manos a la obra para retornar la normalidad a la sanidad vasca, con una Atención Primaria especialmente convaleciente.

A instancias de la consejera, el Consejo de Gobierno Vasco aprobó en 2022 la mayor ampliación de plantilla en Osakidetza de los últimos 20 años, con la intención de sumar 2.467 plazas

En esta línea, a instancias de la consejera, el Consejo de Gobierno Vasco aprobó en 2022 la mayor ampliación de plantilla en Osakidetza de los últimos 20 años, con la intención de sumar 2.467 plazas ysituar a la estructura del Servicio Vasco de Salud en 30.073 plazas. Concretamente, se reflejaron 2.109 plazas temporales que pasarían a ser estructurales y 358 plazas más con el objetivo de seguir reforzando la Atención Primaria. Una estrategia que desde la Consejería de Salud basaron en dos vertientes prioritarias: dotar de estabilización a los puestos temporales y reforzar la Atención Primaria. Políticas que vinieron asentándose con las sucesivas OPE del Servicio Vasco de Salud.

En su balance anual de 2022 para ConSalud.es, la consejera quiso hacer una mención especial al primer nivel asistencial, un ámbito en el que “hemos hecho un importante esfuerzo para afrontar las consecuencias de la falta de facultativos especializados en medicina familiar y comunitaria, así como medidas organizativas para cubrir, de la mejor manera, todo el territorio”. La responsable vasca se refirió también al aumento de la cartera de servicios con la incorporación de “nuevos profesionales en farmacia comunitaria, fisioterapia y salud bucodental”; al desarrollo de la indicación de Enfermería; o a la inversión en infraestructuras y nuevas dotaciones tecnológicas para evitar demoras y desplazamientos a la ciudadanía”.

En el último tramo de su legislatura Gotzone Sagardu ha cumplido una de las principales metas de su mandato: la aprobación de en el Parlamento autonómico de la Ley de Salud Pública

De la misma manera, en el último tramo de su legislatura Gotzone Sagardu ha cumplido una de las principales metas de su mandato: la aprobación de en el Parlamento autonómico de la Ley de Salud Pública. Esta norma es la primera que regula específicamente esta materia y supuso dotar a Euskadi de un marco legal actualizado para “profundizar en la salvaguarda y potenciación de la salud de la población vasca como bien público de máximo interés, reforzando la garantía de los derechos de las personas en materia de salud, la igualdad de oportunidades y la equidad”, según señalaron desde el Ejecutivo.

Este mismo mes de enero, Osakidetza ha abierto también la puerta a la llegada de profesionales extracomunitarios, al reconocer la existencia de 55 especialidades de medicina o enfermería "deficitarias o de difícil cobertura" por la falta de candidatos. Así, en aplicación de la mencionada Ley de Salud Pública aprobada el pasado noviembre, ha eximido del requisito de nacionalidad a los aspirantes que se presenten a los procesos para cubrir estas plazas, con el fin de poder atraer a los sanitarios de más allá de nuestras fronteras "por razones de interés general".

Antes de la llegada de las nuevas elecciones la consejera de Salud aprobó los presupuestos sanitarios para 2024. Una inversión de 4.896,6 millones de euros

Por otra parte, antes de la llegada de las nuevas elecciones la consejera de Salud aprobó los presupuestos sanitarios para 2024. Una inversión de 4.896,6 millones de euros –el departamento con mayor dotación- que suponen un aumento del 5,3% respecto a las cuentas del año anterior e implican destinar 8 de cada 10 euros del presupuesto total de Euskadi a políticas sociales. El principal objetivo de estas cuentas, según Sagardui, será “seguir reduciendo las listas de espera y la demora en la atención” para volver a datos previos a la irrupción de la pandemia.

Cabe mencionar también que recientemente la Comisión Europea destacó la Estrategia sanitaria vasca en materia de envejecimiento y cronicidad como buena práctica a transferir a otros países de la Unión Europea, en el marco del proyecto JADECARE. Con todo ello, se abre un nuevo ciclo electoral en el País Vasco que está por ver si permitirá a la actual responsable de Salud consolidar sus estrategias de la última legislatura o bien se produce algún cambio en el color del Gobierno que se traslade a la Consejería de Salud –EH Bildu viene ganando enteros en las encuestas-.

RECLAMACIONES SINDICALES

Las distintas protestas y paros sanitarios han sido otro elemento recurrente en la actual legislatura de Gotzone Sagardui. Sin ir más lejos, desde el 8 de enero permanece vigente la huelga en el transporte sanitario del País Vasco para reclamar la equiparación en las condiciones laborales de este colectivo con respecto al resto de sus compañeros de Osakidetza. Igualmente, el pasado 25 de octubre y 19 de diciembre se vivieron dos jornadas de movilizaciones entre los profesionales sanitarios, bajo la premisa de que "la calidad de los servicios públicos está sufriendo un deterioro notable”.

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