El presidente de la Unión Europea de Hospitales Privados (UEHP), Paul Garassus, ha advertido de que el COVID-19 no solo es un peligro para los ciudadanos europeos, sino también para los "sistemas de salud".
"Los sistemas de salud han contribuido al éxito colectivo, pero también se han debilitado. Entre la hiperactividad vinculada a la atención intensiva de pacientes graves y la interrupción de las actividades programadas, los centros sanitarios han podido reaccionar con talento y eficiencia a pesar de la complejidad de las limitaciones. La colaboración público-privada ha sido esencial en toda Europa para la movilización tanto de personal como de material, incluso si faltaban equipos de protección o respiradores", ha argumentado en un artículo de opinión.
Garassus: "Los hospitales no deben ser las segundas víctimas de la pandemia del COVID-19
En este sentido, ha alertado de que la calidad del sistema sanitario "solo puede existir a través de una financiación adecuada e innovadora". "La calidad de la atención siempre está correlacionada con la cantidad de gasto en salud y actualmente es aún más relevante, ya que se trata de una inversión productiva para el futuro", ha recordado. En este sentido, ha advertido de que "cualquier restricción hoy pondrá en peligro vidas mañana".
Por ello, considera que "las soluciones prácticas y negociadas siguen siendo esenciales para garantizar la eficiencia de los hospitales en todos los estados miembros". "Sin una protección financiera adecuada, todas las fuerzas sanitarias se verán debilitadas. Se deben tomar todas las medidas económicas de protección, nacionales y regionales, para mantener la viabilidad del suministro de atención médica. Los hospitales no deben ser las segundas víctimas de la pandemia del COVID-19", concluye.