El neumococo (también conocido como 'Streptococcus pneumoniae') es la causa más común de infección de los oídos y los senos paranasales, pero también es uno de los principales contribuyentes a enfermedades más graves como la neumonía, la sepsis (envenenamiento de la sangre) y la meningitis. Las infecciones neumocócicas afectan principalmente a niños menores de dos años y ancianos, y se cobran casi dos millones de vidas en todo el mundo cada año.
Investigadores del Karolinska Institutet en Suecia han identificado una nueva vacuna candidata contra los neumococos. Las moléculas de la vacuna comprenden vesículas de membrana de tamaño nanométrico producidas por la bacteria y brindan protección en ratones.
Una vacuna neumocócica se ha incluido en el programa de vacunación infantil de Suecia desde 2009. La vacuna se ha desarrollado para proteger contra infecciones graves en los niños, pero solo se dirige a una fracción de los cerca de cien tipos diferentes de bacterias neumocócicas que se han descrito hasta ahora. Desde que se introdujo la vacunación infantil, la incidencia de infecciones neumocócicas graves en lactantes ha disminuido, efecto que no se ha observado en adultos.
La vacuna se ha desarrollado para proteger contra infecciones graves en los niños, pero solo se dirige a una fracción de los cerca de cien tipos diferentes de bacterias neumocócicas que se han descrito hasta ahora
"Existe una necesidad urgente de nuevas estrategias de vacunas para proteger a los ancianos de las infecciones neumocócicas. La cantidad de infecciones neumocócicas graves en adultos no ha disminuido significativamente y la mayoría de las infecciones ahora son causadas por bacterias neumocócicas contra las que las vacunas actuales no protegen", señala la última autora del estudio, Birgitta Henriques-Normark, profesora del Departamento de Microbiología, Tumor y Biología Celular del Karolinska Institutet.
En este estudio, los investigadores de KI examinaron la posibilidad de desarrollar una vacuna basada en vesículas de membrana de tamaño nanométrico que las bacterias neumocócicas producen naturalmente a partir de su membrana celular para comunicarse con su entorno y afectar a otras células. Estas vesículas contienen proteínas que ayudan a las bacterias a evadir el sistema inmunológico del huésped.
Los investigadores aislaron esas vesículas, llamadas partículas de membrana, de bacterias neumocócicas cultivadas. Descubrieron que la inmunización con estas vesículas de membrana protegía a los ratones de contraer infecciones graves por neumococos. Además, los ratones desarrollaron protección no solo frente a la cepa neumocócico de la que se aislaron las partículas, sino también frente a otras cepas/tipos neumocócicos.
Los investigadores identificaron dos proteínas en las partículas de membrana, MalX y PrsA, las cuales son esenciales para el principal efecto protector. "Nuestra candidata a vacuna, partículas de membrana que contienen estas dos proteínas, brinda protección independientemente del tipo de neumococo. Los resultados sugieren que las partículas de membrana se pueden usar como plataforma para producir vacunas contra infecciones neumocócicas y quizás otras infecciones bacterianas, y esto es algo en lo que ahora estamos trabajando", señala el profesor Henriques-Normark.